Málaga

Unas 15 farmacias malagueñas están en trámite de concurso de acreedores

  • La facturación ha caído un 20% en el último año debido a las medidas de contención del gasto dispuestas por el Gobierno y a la retracción de las familias en la compra de productos no cubiertos por la Seguridad Social

Hasta hace muy poco, tener una farmacia era garantía de un negocio próspero. En los tiempos que corren, ya no tanto. Tres boticas malagueñas están inmersas en un concurso de acreedores y otras 12 han iniciado ese trámite debido a la asfixia económica que sufren.

La mayoría son farmacias de poblaciones medianas y pequeñas que no pueden hacer frente a la merma de la facturación -derivada de las medidas de contención del gasto farmacéutico dispuestas por el Gobierno central y de la restricción del consumo de las familias de productos no subvencionados por la Seguridad Social-, pero también hay alguna en la Costa del Sol. Se trata de establecimientos adquiridos desde 2005, con una previsión de rentabilidad mayor, pero que ahora con el recorte de los ingresos no pueden afrontar los gastos más la hipoteca.

Según el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Málaga, Javier Tudela, de media la facturación de las boticas malagueñas ha caído un 20%. La factura al Servicio Andaluz de Salud -que supone el 80% del volumen total- se ha reducido un 15%, según los datos de la entidad colegial. Este recorte es producto de la aplicación de los dos decretos dictados el año pasado por el Gobierno central en los meses de marzo y mayo para frenar el gasto farmacéutico. En este bloque están los fármacos financiados por la Seguridad Social.

Pero también ha bajado la facturación de los productos sin subvención pública, que representan el 20% de las ventas y que incluyen artículos de parafarmacia, herboristería o medicamentos de venta libre. Este apartado ha experimentado un descenso de un 25 a un 30%, de acuerdo a los datos del Colegio, debido a la contención de las familias en el gasto. "Estamos en el umbral de la rentabilidad", asegura Tudela.

Según los datos del Colegio de Farmacéuticos de Málaga, la aplicación de los decretos nacionales 4/2010 y 8/2010 ha provocado en el sector la pérdida de unos 800 puestos de trabajo desde principios de abril de 2010 a finales de marzo de 2011, una cifra que incluye los contratos no renovados, las vacaciones no cubiertas y un centenar de despidos.

Y los boticarios temen que habrá nuevos recortes a nivel nacional. De hecho, prevén el anuncio de más medidas de contención del gasto farmacéutico en el Consejo de Ministros del próximo 19 de agosto.

En Andalucía, la intención de la Consejería de Salud de hacer subastas de medicamentos para que las farmacias tengan que dispensar los de menor precio también preocupa al sector. "No entendemos que quieran tomar nuevas medidas cuando hemos hecho los deberes. Desde 2001 en Andalucía se prescribe por principio activo y desde 2007 hemos implantado la receta electrónica. Que no aprieten más a las farmacias, que nos van a llevar a la ruina", asegura Tudela.

En el mes de septiembre, está previsto un comité ejecutivo del Consejo Andaluz de Colegios de Farmacéuticos (Cacof) justamente para analizar la situación del sector, las medidas que previsiblemente adoptará el Gobierno al viernes de la próxima semana y la postura de los boticarios andaluces.

Tudela comentó que este año el presupuesto autonómico de gasto farmacéutico se hizo con la previsión de un recorte del 6,5%. Sin embargo, la factura ha bajado más del doble; un 15%.

Por eso, Tudela no cree que en Andalucía vaya a haber problemas de cobro como ocurre en Castilla-La Mancha, donde los farmacéuticos de Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo realizaron ayer un cierre de sus establecimientos para demandar el pago de los 125 millones de euros que les adeuda el Gobierno regional.

El presidente del Colegio malagueño precisó que en Andalucía los pagos se están haciendo entre 55 y 60 días. Debido a que el recorte del gasto es más del doble de lo previsto (-15% frente al -6,5% presupuestado), Tudela no cree que en la provincia vaya a haber problemas de cobro. "Se paga menos de lo presupuestado, por lo tanto lo lógico es que haya dinero hasta final de año", sostuvo.

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