En la tarde de este lunes, remolcado por el remolcador Roma, el dique flotante Andalucía dejaba las aguas del puerto de Málaga. Navegando con destino a las instalaciones que el grupo Mario López Cernaval tiene en localidad sanroqueña de Campamento, este dique, según fuentes de la empresa propietaria, viaja para realizar un reconocimiento en seco y para renovar todos sus certificados; unas actuaciones que se iniciarán en dos o tres semanas y que, si no hay cambios de última hora, tendrán al dique de vuelta en el puerto de Málaga antes de que finalice el presente año.

Preparado este traslado desde hace algo más de un mes, la semana pasada, el Andalucía era atracado en el muelle número cuatro para ultimar todos los detalles de su marcha y cargar sobre él una serie de elementos que también realizarán este viaje. Ya con todo preparado, este lunes por la mañana, el remolcador Roma que curiosamente es el veterano Torre Vigía que operó en aguas malacitanas entre las décadas de 1980 y 1990, se posicionaba junto al dique para fijar los cabos y las cadenas con las que iba a ser remolcado.

Convertido en un elemento fundamental de la actividad portuaria malacitana de los últimos cincuenta años, el Andalucía, entre octubre y diciembre de 2011 dejaba las aguas malagueñas para sufrir una transformación que aumentó su eslora en 45 metros. Este importante trabajo que, con un coste que rondó los cinco millones de euros, desde aquella fecha le ha permitido gestionar reparaciones de buques de hasta 150 metros.

Mantenida durante los últimos años una carga de trabajo bastante regular, el Andalucía realizó entre los meses de marzo y abril de este año uno de sus trabajos más importante en su dilatada historia malagueña. Tras sufrir una colisión contra un islote en el Mar Egeo, el buque cochero Integrador llegaba al dique para cambiar su destrozado bulbo y reparar los graves daños que presentaba en su amura de estribor; unas actuaciones que necesitaron la reposición de 20 toneladas de acero y en la que trabajaron 50 operarios en turnos continuados de día y noche.

Auxiliado por los remolcadores Vehintiocho y Trheinta, este lunes a las 15:00, tras la salida del Melillero, la dársena de Heredia se despedía del dique flotante Andalucía que una hora después salía por la bocana del puerto para iniciar una lenta navegación que hoy lo posicionará en las instalaciones sanroqueñas del Grupo Cernaval Mario López.