Málaga

La forense desmonta la versión de la acusada de degollar a una mujer

  • Las características de la herida ratifican que quien la agredió estaba detrás Los psicólogos hablan de "personalidad explosiva"

La versión ofrecida por la acusada de degollar a una mujer en Rincón de la Victoria con la que mantenía una deuda relacionada con la venta de joyas se vio ayer desmontada en la segunda sesión del juicio que se sigue en la Ciudad de la Justicia con un jurado popular. La forense que practicó la autopsia a la víctima ratificó que las características de la herida mortal que presentaba en el cuello indican que quien la agredió estaba detrás de la víctima. La acusada declaró el lunes, durante la primera sesión, que la mujer y ella iniciaron una discusión en la que la fallecida le tiró las gafas al suelo, por lo que tras recuperarlas, ella estiró el brazo sujetando el cúter.

La médico forense insistió a preguntas del fiscal y de la defensa que "el agresor debía estar detrás de la víctima" con un instrumento de poco espesor, borde afilado y superficie lisa. La herida grande del cuello era profunda y mortal -en dirección oblicua descendente de izquierda a derecha- y afectaba a la arteria carótida y a la traquea, por lo que murió de forma inmediata desangrada. La víctima presentaba otras heridas más superficiales, pero la forense dejó claro que en ningún caso son producto de un forcejeo; "no es lógico que la atacaran de frente, porque habría intentando coger el arma" y presentaría heridas de defensa de las que la fallecida carecía.

La valoración de los forenses después de exámenes psiquiátricos realizados a la acusada en el intervalo de un mes la resumieron ayer: no presenta ni padece ninguna enfermedad psiquiátrica y no existe ninguna circunstancia que le modificara o alterara la voluntad, por lo que calificaron lo ocurrido como "un acto impulsivo" derivado de un enfrentamiento o conflicto. Lo que viene a decir que la acusada presenta en su personalidad ciertas características "marcadas" y de alguna manera una "personalidad explosiva" -aunque sin estar dentro de los parámetros del delincuente habitual-. Por lo que se produce es una reacción ante estímulos que pueden ser problemas económicos, familiares o de otra índole que pueden llevar a cometer un delito.

Por otro lado, la hermana de la acusada trató ayer de continuar con la línea marcada por la defensa de que la víctima tenía atemorizada a la acusada, en la búsqueda de que no sea considerado un asesinato. En su declaración explicó que muchos meses era ella misma la que le entrega la parte correspondiente de la deuda a la fallecida; "a mi hermana la ponía muy nerviosa", declaró.

El Ministerio Fiscal pide que la acusada sea condenada a 21 años y seis meses de cárcel por un delito de asesinato y otro de hurto. Según la versión mantenida por el fiscal el 18 diciembre de 2013 la acusada acudió al paseo marítimo de La Cala del Moral y tras discutir nuevamente con la víctima por la deuda pendiente, aprovechando que la víctima se había sentado en las escaleras y que se encontraba de espaldas la degolló con un cúter. Después mantiene que le quitó las joyas a la víctima, entre ellas un reloj de oro que fue localizado por los agentes en un trastero de la acusada y que ella mantiene que se lo había comprado con anterioridad.

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