Ocho de los 11 gerentes con derecho a variable los cobraron íntegramente

Ocho de los 11 gerentes de empresas municipales con parte de su salario anual vinculado al cumplimiento de objetivos acabó 2013 ingresando la totalidad de la remuneración. El análisis de las previsiones a cubrir por estos directivos en 2014, que el pasado martes adelantó Málaga hoy y que ayer publicó el Ayuntamiento en su página web, permite comprobar lo variopinto de las exigencias que se demandan a algunos de los gerentes respecto de otros.

El ejemplo más palpable es el del responsable de la Empresa Municipal de Aguas (Emasa), José Luis Rodríguez, que pasó a percibir íntegramente los 24.000 euros asignados por objetivos por garantizar un agua de calidad en la ciudad. Un parámetro, en cualquier caso, que como admitió el concejal de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, está más condicionado a las condiciones técnicas de la planta de El Atabal que a la gestión de Rodríguez.

Sobre esta base, el gerente de Emasa se garantizó unos emolumentos de 119.000 euros (95.000 de ellos fijos y los mencionados 24.000 en variable) en 2013, montante que no parece previsible cambie en la presente anualidad. La cifra sólo es superada por la de Miguel Ruiz, gerente de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). A diferencia de Rodríguez, Ruiz no percibió en su totalidad los 20.680 euros que se le atribuyen por objetivos, dado que él mismo renunció a un 10% "en un gesto con los trabajadores" de la sociedad municipal. A pesar de la merma de unos 1.800 euros, su salario acabó en 123.000 brutos.

Otro de los que finalizó el curso pasado con todos los ingresos posibles fue el gerente de la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa), Juan Carlos Romero, y ello a pesar de la situación delicada por la que atraviesa la sociedad mixta como consecuencia de la caída en la venta de aparcamientos, fundamentalmente. Romero, según confirmó el concejal de Movilidad, Raúl López, sí recibió los 15.000 euros a los que tiene derecho en concepto de variable, a sumar a los 80.000 ya fijados en su nómina. En total, 95.000 euros.

Federico Souvirón, en calidad de gerente de Parcemasa, también cobró al 100% los 12.000 euros a los que tiene derecho por contrato como complemento por objetivos, que con los 55.000 de sus emolumentos base, sumaron 67.000 euros. En esta misma línea de cumplimiento pleno están, según el concejal de Cultura, Damián Caneda, el director del Festival de Cine, José Antonio Vigar, que percibió por ello 8.700 euros (más 55.000 de salario) y la directora del Teatro Cervantes, Charo Ema, con 13.400 en variable.

En la otra parte de la balanza se encuentra los directivos que no han sido capaces de cubrir los objetivos marcados. Entre ellos Yolanda Aguilar, la directora del Palacio de Ferias. A la misma se le vincula un complemento de 22.000 euros, si bien no lo cobró en su totalidad. Según informaron desde el Consistorio, Aguilar cumplió el 75% de los objetivos, lo que se tradujo en 16.500 euros. A esta cifra hay que agregar los 55.000 euros brutos de salario.

El caso de Aguilar es el que más fielmente refleja la política de ajustes impulsada por el alcalde, Francisco de la Torre, desde 2010 en los salarios de los gerentes. Muestra de ello es que las retribuciones que tiene asignadas la responsable del ente ferial, al que cada año el Ayuntamiento tiene que inyectar entre 1,5 y 2 millones para cuadrar sus números, alcanzan un máximo de 77.000 euros, muy lejos de los alrededor de 200.000 que llegó a ingresar hace más de un lustro.

El alcalde, Francisco de la Torre, salió en ayer defensa de la fijación de objetivos a estos directivos para el cobro de parte de sus emolumentos. Incluso en el caso del gerente de Emasa, al que sólo se le exige que la empresa dé un agua de calidad. Sobre ello, el regidor se limitó a comentar: "La calidad del agua es fundamental". No obstante, sí avaló la posibilidad de introducir otros elementos a valorar en el caso de los objetivos de Rodríguez, en la línea de lo expuesto por el edil de Medio Ambiente. En cuanto a la generalidad de los variables, consideró que se trata de "un criterio de productividad".

Opinión bien distinta ofrecieron los portavoces de la oposición, María Gámez, del PSOE, y Eduardo Zorrilla, de IU. Ambos coincidieron en señalar que los mencionados complementos por objetivos no son más que una forma de "enmascarar" un aumento de la retribución a estos directivos. "En la mayoría de los casos son complementos artificiosos", dijo Zorrilla, mientras Gámez estimó que lo que se busca es "vestir el santo para que los cobren".