La gran aventura de Adrián Martín

A Adrián Martín, un niño de 11 años de Vélez-Málaga que padece hidrocefalia, su enfermedad no le ha impedido hacerse un hueco en el mundo de la música, lanzar un disco y ser nominado a los Grammy Latinos. Desde que se hiciera viral un vídeo suyo cantando y apareciera en un conocido programa de televisión, todo le ha venido rodado. Su primer disco, Lleno de vida, consiguió ser número uno en ventas durante las tres primeras semanas y, en tan solo tres meses, se convirtió en disco de oro al superar las 20.000 copias vendidas.

"Ha sido todo inesperado, cada paso que ha dado ha ido a más y a más, no nos lo esperábamos", admite Rafael, su padre, que vive la aventura de su hijo con tanta o más ilusión que el pequeño. El pasado miércoles se llevaron, de nuevo, una agradable y gran sorpresa: la nominación de Adrián al Grammy Latino. "Cuando nos llamaron para decirnos lo del premio alucinamos, empezamos a dar saltos de alegría". Para la familia, cada logro del pequeño es un hecho maravilloso, pero para Adrián se convierte en algo increíble. "Papi, ¿eso es verdad?" preguntó el pequeño a su padre cuando entendió lo que pasaba. "No nos lo creíamos, ni nosotros ni él, es algo que nunca imaginamos", cuenta Rafael.

Para Adrián la vida cotidiana se mezcla con estas nuevas experiencias. Sigue yendo al colegio y a sus clases de apoyo, llevando una vida normal de un niño de su edad. "Como vivimos en un pueblo es normal que casi todo el mundo le conozca y le paran por la calle para darle la enhorabuena", explica su padre, orgulloso. "En esos momentos vemos como él es feliz y eso es lo mejor de todo esto". Según Rafael, el éxito también ha servido para subir la autoestima y la confianza de Adrián. "A él siempre le ha costado un poco coger el ritmo de los demás niños, pero ahora, cuando la gente le felicita, le reconoce su arte y le habla por la calle, él se siente especial y se llena de alegría"

Compite con grandes de la música por el Grammy Latino y es algo que tienen claro, sin embargo, haber llegado hasta aquí es ya más que un premio y más que un sueño para este niño veleño. Ha emocionado a mucha gente con su voz y ha conseguido demostrar que nada es impedimento para hacer lo que le gusta. Y, como dice su padre, "un premio siempre viene bien, no vamos a negarlo, pero el ya tiene su premio desde hace mucho tiempo, hacer lo que le gusta y ser feliz. Sobre todo eso".