El movimiento de vehículos de transporte de viajeros en la provincia de Málaga fue ayer prácticamente nulo. Una nueva jornada de huelga por parte de los trabajadores del sector, que paró a unos 1.500 operarios de 103 empresas, obligó a los miles de pasajeros del aeropuerto que llegaron a la capital de la Costa del Sol con el traslado contratado hacia los puntos de destino a desplazarse en taxis o esperar a las furgonetas alquiladas por los touroperadores con los que organizaron su viaje. La medida, que según el sindicato Comisiones Obreras afectó a un total de 50.000 personas, también incidió significativamente sobre los clientes de establecimientos hoteleros que preveían realizar excursiones.

El nivel de seguimiento de la huelga, según confirmaron desde los sindicatos y desde la patronal, fue total. "Los efectos se han dejado notar principalmente sobre el aeródromo, con unas 50.000 personas", explicó el secretario general de Transportes de CCOO en Málaga, José López. La incidencia de estas medidas puede ser mayor en la jornada de hoy, día en el que tradicionalmente se organizan un gran número de excursiones por parte de turistas.

Esta es la segunda fase de las protestas que viene desarrollando el sector del transporte de viajeros desde hace varias semanas por el desacuerdo existente en las negociaciones que se mantienen con la Asociación Provincial de Empresarios Transportistas y Agencias de Málaga (Apetam), a la que los trabajadores demandan una reducción de la jornada diaria, que debería pasar de las 15 a las 12 horas como máximo y la aprobación de un descanso semanal de dos días. Sin embargo, y tras varios contactos entre las partes, el acuerdo sigue estando lejos.

"La incidencia que está teniendo la huelga no es nada buena, porque el transporte está parado y no se están haciendo casi servicios", comentaba ayer el presidente de Apetam, Emilio Domínguez, quien confirmó que las empresas de touroperadores "están buscando furgonetas para poder llevar a la gente que sale de los hoteles y los aeropuertos", un comportamiento que denunciaron los sindicatos, al entender que es un transporte discrecional "encubierto". "Informaremos a los conductores de esos vehículos para que sepan que eso no pueden hacerlo", confirmó López.

Si bien los mayores damnificados en esta ocasión son los viajeros del aeródromo, el representante de la patronal llamó la atención sobre el hecho de que hay cruceros con destino Málaga que han optado por cambiar el puerto de escala y se han desplazado a Motril, donde no hay problemas con el transporte. Cabe recordar que en la anterior convocatoria de paro, la falta de autobuses hizo que al menos cuatro buques, con unas 4.600 personas a bordo, modificasen su recorrido y evitasen Málaga. "Lo que no entiendo es que hablemos del turismo como la industria principal y las autoridades no hayan intervenido", dijo Domínguez.

Al coincidir con el fin de semana, el efecto de la huelga no se deja notar sobre el transporte escolar. Algo que sí ocurrirá, previsiblemente, mañana, jornada en la que se mantiene la protesta. De acuerdo con los datos de la patronal, la ausencia de vehículos hará que haya alrededor de 15.000 estudiantes que se quedarán sin este servicio. El calendario de huelga planificado por los sindicatos incluye paros los próximos 7, 8, 9, 14, 15, 21, 22, 28 y 29 de junio.