-Es médico, ¿sigue el consejo que siempre dan los facultativos de hacer ejercicio?

-Hago ejercicio en solitario. Corro, nado y me gusta montar en bici.

-¿Y le gusta el carril bici de Málaga?

-Como punto de partida de algo me parece interesante, pero lo ha diseñado alguien que no ha montado nunca en bicicleta. Creo que está muy mal diseñado. Los itinerarios son curvilíneos, no son lineales. Hay que estar cruzando continuamente de una acera a otra. Es importante que haya que cruzar las menores veces posibles por donde pasan los coches, porque ahora mismo no hay cultura de respetar a los ciclistas, ni tenemos cultura los peatones de respetar el carril bici. Aquí en el carril bici hay contenedores, sillas de los bares...

-¿Ha hecho cuentas de cuánto pierde con los recortes?

-Es un 7 o un 8%. Más que esa bajada, me parece totalmente injusta la bajada a los interinos y que se hagan recortes -si se llegan a hacer- quitando jornada de tarde que se usa para sacar adelante el trabajo y quitar listas de espera. La opinión pública parece que ve bien que se hagan recortes de sueldo a los funcionarios. Debe tener un concepto del funcionario del siglo XIX. Funcionarios son los guardias civiles que colaboran con el Infoca para extinguir incendios, los que miran debajo del coche todas las mañanas en algunos sitios de España, los bomberos, los enfermeros que están de guardia de noche por sueldos muy modestos, los maestros o muchas personas que prestan un servicio importante a la sociedad, o los mismos médicos.

-¿Y en qué recortar?

-Yo suscribo no al 100, sino al 200% las peticiones de los directores de unidad de gestión clínica acerca de que hay algunas agencias en Andalucía, como la Escuela Andaluza de Salud Pública, la Agencia de Evaluación de Nuevas Tecnologías, la Fundación Iavante y todas las que se me olvidan que podrían ser cerradas hoy mismo sin que se resintiera para nada la asistencia. Probablemente hay que empezar a recortar por ahí. Que hayan bajado los sueldos al personal sanitario me parece profundamente injusto. En la Unidad de Hemodinámica de momento no hemos tenido recortes de jornada ni de uso de material. Hasta ahora todo lo hemos resuelto negociando amistosamente con la Administración de nuestro hospital y con la industria. Y estoy seguro de que seguirá siendo así. No contemplo el escenario de que de nos digan que en lugar de poner 2.500 stents como el año pasado, este año solo podamos poner 1.500 porque los otros 1.000 no los hemos puesto por gusto.

-Médicos del Materno alertan de que no se podrán mantener los topes en lista de espera. ¿Qué cree?

-Que no se garantizarán si nos recortan jornada. En Hemodinámica, de momento, no se nos ha recortado jornada.

-¿Hay tanto malestar como dicen los sindicatos debido a los recortes?

-Hay malestar, pero no comparto el catastrofismo de los sindicatos. Probablemente, lo primero que tendrían que hacer todos ellos es pedir la drástica disminución del número de liberados sindicales. Entonces podrían tener cierta credibilidad.

-¿Su unidad tiene proyectos de investigación?

-La Unidad de Hemodinámica tiene proyectos propios y con otros grupos. En 2012 ha hecho cuatro publicaciones en revistas internacionales con alto impacto. La investigación es muy importante, pero también es importante en manos de quien pones los recursos para que haya resultados y los resultados son básicamente publicaciones o alguna patente. Los proyectos de investigación deben verse reflejados en publicaciones y en revistas de impacto para saber a qué grupos se pueden dar fondos para investigar y a cuales no.

-¿Y esas investigaciones corren peligro con los recortes?

-La de nuestra Unidad no porque la hacemos en nuestras casas y sacando tiempo de donde no tenemos. Sobre todo sacada del tiempo del doctor Antonio Muñoz y del doctor Manolo Jiménez.

-¿La gente usa mal la sanidad ?

-En el país hay un problema serio de educación cívica. La que tenemos que dar los padres a nuestros hijos, enseñándoles valores de honradez, del esfuerzo, de la satisfacción por las cosas bien hechas, la responsabilidad de no engañar a nadie, el respeto a los demás y a uno mismo. Aparte de que se lo digas a tu hijo, tú debes ser ejemplo. Porque si intentas inculcar esos valores pero estás imputado en la operación Malaya, te dirá ¿papá, que me estás contando? Habría que comunicarle a la sociedad, cuando estuviera educada, señores, tenemos unos recursos limitados, por favor hagan uso de los recursos cuando realmente lo necesiten.

-¿Y ese uso no es el correcto?

-Hay estudios que dicen que el 80% de las personas que van a Urgencias no lo necesitan. A mí me parecería una idea magnífica dar a las personas cuando van al hospital no una factura sombra, sino una factura muy bien soleada, sobre el coste. Para que sepan lo que cuesta la sanidad. Y para que sepan la parte de ese coste que corresponde a personal, que en la mayoría de los casos es ridículo. Hicimos un estudio; en un paciente que se hacía una angioplastia y se iba en el día, los costes de personal no llegaban ni al 10%.

-¿Qué le parece que los sin papeles se queden sin asistencia?

-Absolutamente injusto, una auténtica barbaridad. Esta entrevista se llama balcón de notables. Habría que crear un balcón de sobresalientes para los que trabajan con la gente más necesitada, como Madre Coraje o Cáritas. Me parece tremendamente injusto. Sobre todo tomarlo como una medida sin haber tomado antes otras, cuando no se ve ninguna austeridad por parte de la Administración. Montones de cargos de confianza que son cuñados, primas, novias, nueras en todos los partidos políticos. Acaba de llegar IU al poder y ha hecho justo lo contrario de lo que estaba predicando. Si hubiéramos tenido una austeridad tremenda en la Administración y de todas maneras no nos llegara, podría plantearse qué hacemos con los sin papeles. Pero como primera medida es injusto. El flujo de población que llega a países mejores ha existido siempre. Los que vienen de África o Suramérica vienen buscando una vida mejor y eso no se puede evitar, salvo que Occidente se conciencie de que tiene que mejorar las condiciones de vida en los países de los que viene la gente.

-¿La telemedicina, la monitorización a distancia debe potenciarse aún más?

-Es muy importante todo lo que haga que el paciente no necesite ir al hospital para algo que se podría hacer desde su casa.

-¿La gente cuida bien su corazón?

-Hay campañas para que cuiden su hipertensión, la diabetes, el sobrepeso. No sé hasta qué punto son efectivas. Algunos grupos han denunciado que hay un aumento de la obesidad infantil. Vas por la calle y parece que esos grupos tienen razón. Eso es muy malo para el futuro. Las campañas antitabaco sí que han tenido su efecto.

-¿Y qué le parece que no se pueda fumar en los bares?

-Está bien que no se fume, no creo que se hayan resentido. Pero les pusieron una ley donde se podía fumar en un pequeño reducto, hicieron una inversión costosa y de pronto eso no les servía para nada.

-¿Por qué se vincula el amor y el corazón?

-Me imagino que porque cuando estás enamorado de alguien, el corazón como que te late más de prisa, notas como un sobresalto. Porque cuando sientes emociones notas algo en el pecho.

-¿Y eso a qué se debe?

-Porque hay una descarga de catecolaminas.

-Trabaja en la sanidad pública y en la privada. ¿Qué diferencias ve?

-La medicina privada en Málaga ha mejorado mucho en los últimos años y tiene una calidad que es superponible a la medicina pública. La medicina pública es muy, muy, muy buena. Yo no entiendo esta dicotomía. Aquí la medicina privada está dando trabajo a mucha gente porque se atiende a pacientes de otras nacionalidades que tienen un seguro privado, de otros países que vienen a ser atendidos en la medicina privada, a personas que tienen doble aseguramiento o a funcionarios del Estado que tienen derecho a una póliza. Todo esto genera actividad económica. Yo creo que no va en detrimento de la medicina pública. Más bien al contrario. Solo si la mitad de estas personas, al no existir las clínicas privadas, tuvieran que ir a hospitales públicos... El problema de los hospitales públicos es que están muy saturados, pero la calidad de la asistencia es excepcional. La medicina privada es un complemento interesante, que genera una actividad económica.

-Desde que saltó Malaya, siguen saliendo casos de corrupción. ¿Le sorprenden?

-Ya es difícil sorprenderse. Estos casos causan un daño enorme a la sociedad pues generan una absoluta desconfianza hacia nuestros políticos. Cuando ahora se plantea si nos interviene Alemania... Yo quiero ser un lander alemán porque probablemente esta sociedad del centro de Europa tiene otros valores. Ellos, cuando tienen un político corrupto que ha falsificado el curriculum, sus compañeros de partido lo invitan a que se marche. La única manera de que los casos de corrupción se atajen, de que el gasto autonómico se controle, de que se vean mal los casos Malaya, los Gürtel, los ERE es que nos gobiernen desde Alemania. Hace un año hicieron unos tests de estrés a nuestros bancos y eran todos la hormiga atómica y ahora resulta que los bancos están quebrados... Esto es el Inside Job español.

-¿Una ilusión o un sueño por cumplir?

-Voy a ser abuelo dentro de poco y estoy muy ilusionado. ¿Un sueño por cumplir? Me gustaría tener tiempo suficiente para hacer un largo viaje en coche por Europa, como hacían los viajeros románticos del siglo XIX, sin tener destino fijo ni una fecha de vuelta.

-¿Qué le falta a Málaga?

-Málaga ha mejorado muchísimo. El puerto ha quedado muy bonito, aunque tampoco es como para que ninguna autoridad saque pecho después de lo que ha tardado el proyecto. Calle Alcazabilla está muy agradable, tenemos unas comunicaciones muy buenas. Globalmente, es una ciudad agradable para vivir. Quizás está un poco sucia, pero de eso somos responsables todos los malagueños. Y para llevar el Metro hasta El Palo tendríamos que estar seguros de que hay dinero para terminarlo en un año porque sería terrorífico que nos levantaran El Parque y La Alameda y de pronto dijeran 'no hay dinero'. Lo que le hecho en falta es la actividad cultural que hubo en algunos momentos en el Teatro Cervantes en tiempos de Pedro Aparicio y que se ha ido perdiendo poco a poco para haber quedado absolutamente en nada.

-¿Una reivindicación que tenga como médico?

-Como cardiólogo intervencionista, nuestro trabajo está reconocido por los pacientes. Pero hay una clara falta de reconocimiento para algunos colectivos de médicos que trabajan en condiciones mucho peores, como los médicos que trabajan en Atención Primaria o los del 061, que parecen que son algo marginal en la sociedad.