Los 'kitesurfers' reclaman su sitio en la playa
Despliegan cometas en la calle Larios en contra de su prohibición en Los Álamos y Guadalmar
"¡No volamos, solo navegamos!" Ese es el lema de una protesta que muchos consideran "innecesaria". Ayer, los kitesurfers ocuparon desde las 18:00 hasta las 20:00 la calle Larios. Llenaron la arteria principal de la ciudad con cometas de colores para exigir que les dejen practicar kitesurf donde siempre, en la playa de Los Álamos. Tras 15 años de deporte seguro y libre de incidentes, la zona se quedó sin tablas. La prohibición provisional se llevó a cabo a petición de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) el 22 de julio. El desencadenante, según informó a este periódico Marta Balmori, secretaria de la Asociación de Deportes Náuticos (ADN), fue un accidente entre una avioneta y un parapente a motor.
Desde ADN no se explican el motivo del veto: "Los únicos perjudicados hemos sido los kitesurfers y nosotros no volamos", comentó Balmori mientras los manifestantes -alrededor de 300 según la asociación- colocaban sus cometas en el suelo haciendo una fila de colores. Según fuentes de AENA, "la prohibición es temporal y ahora mismo se está llevando un estudio para determinar si es peligroso para el tráfico aéreo practicar ese deporte". La decisión final está "en manos de la Asociación Española de Seguridad Aérea, que se basará en nuestro estudio para fijar una postura determinante".
Sergio Perera, presidente de ADN y tres veces campeón de España de kitesurf, aseguró que "no tiene sentido que prohíban este deporte, nosotros no nos elevamos tantos metros como ellos dicen, nunca ha pasado nada", y explicó el "importante daño económico de la medida, ya que son muchas empresas, escuelas, tiendas y federados los que nos hemos quedado sin un sitio donde hacer deporte de forma segura".
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