Esos locos en sus viejos cacharros

Una treintena de vehículos clásicos hicieron ayer las delicias en las calles del centro de los amantes del motor y los curiosos que paseaban. El Club de Automóviles de Época de Málaga, con sede en Alhaurín de la Torre, organizó una concentración de vehículos de entre los años 1920 y 1960, además de dos Mercedes deportivos de 1980. Había coches realmente históricos como un Buick de 1929, que perteneció a la familia de García Lorca o un Bentley MK VI de 1949.

Previamente al paseo por la ciudad, los coches estuvieron estacionados en la antigua sede de Tabacalera, donde ahora está el Museo Automovilístico, una de las apuestas del alcalde, Francisco de la Torre, que no quiso perderse el acontecimiento e incluso paseó en una de esas viejas reliquias del motor.