Málaga espera ingresar por multas de tráfico 18,5 millones de euros en 2026

Hasta el último céntimo suele contar para cuadrar unos presupuestos municipales. Sobre todo si, como los de Málaga capital para 2026, vuelven a pasar por encima de los 1.200 millones de euros. Eso sí, en el capítulo de ingresos hay una casilla que suele molestar especialmente a sus ciudadanos: las multas. Las de tráfico con más motivo. En su proyecto de Presupuestos para 2026, el Ayuntamiento de Málaga prevé recaudar en este concepto 18.485.530 euros. Un millón y medio más que hace sólo un año, que ya crecía medio millón respecto al año anterior.

En el documento, que se aprobará en Junta de Gobierno Local la próxima semana y, posteriormente, en el Pleno de diciembre –teniendo en cuenta que el PP no necesita del voto favorable de ningún otro grupo municipal no cabe duda alguna–, también se incluye una proyección de los ingresos a percibir por el Consistorio, para justificar que los gastos cuadren con lo que se espera llegue a las arcas municipales.

Este 2025, hasta el 30 de septiembre, el Ayuntamiento había contabilizado por multas de tráfico 13.852.257 euros. Esto no quiere decir que todas se hayan abonado hasta el momento, 7.370.847 euros sí forman parte ya de las arcas públicas y 6.564.715 de euros están pendientes de cobro. Lo que quiere decir que, a tres meses de cerrar el año, ya han cubierto el 80% de lo que esperaban.

Si se hace la media mensual, el Ayuntamiento pone multas por valor de 1.154.354,75 euros; que de cumplirse en los tres meses restantes supondrían 3.463.06064,25 euros más. De cumplirse, el Ayuntamiento habría obtenido unos 200.000 euros más de lo esperado por este concepto, es decir, 17,32 millones de euros.

Radares, multas por aparcamiento indebido y otras sanciones por las que perciben una parte de la tarta presupuestaria todos los años, pero que, no parecería, a grandes rasgos, suficiente como para crecer un millón y medio de un año a otro. Si no fuese porque este año se introduce un nuevo motivo para ser sancionado en la ciudad: la entrada de la Zona de Bajas Emisiones, tras el año de gracia que ha estado activa sin multar.

Las sanciones, en caso de acceder al área restringida con un coche sin etiqueta ambiental (es decir, coches de gasolina anteriores a 2000 y diésel más antiguos de 2006), se consideran graves, por lo que conllevan una multa de 200 euros. Que se quedan en 100 euros por pronto pago. La entrada de estas imposiciones, cabe destacar, no viene de la mano de la puesta en marcha de aparcamientos disuasorios.

Si bien no hay datos públicos oficiales, más de una decena de miles de coches que hasta la semana pasada circulaban por el centro de Málaga con asiduidad, hoy tienen el acceso restringido. En toda la provincia, son cerca de 150.000 vehículos los que no tienen etiqueta ambiental.

El Ayuntamiento de Málaga está impulsando sólo dos aparcamientos disuasorios sin haberse licitado las obras aún y en distintas fases del proyecto dos: el que se situará junto al Palacio de los Deportes José María Martín Carpena y el del Arroyo de Totalán. El primero contará con 476 plazas, el segundo, se estimaba en 1.500, aunque recientemente se impulsó un estudio de demanda que atinará más esa cifra. En las cuentas para el año que viene les dedica 300.000 euros.

El aparcamiento junto al pabellón deportivo tiene una previsión de coste de entre 20 y 23 millones de euros con IVA, mientras que los accesos alcanzarían los 6 a 14 millones de euros de presupuesto con IVA, según la alternativa seleccionada.