A falta de un día para la llegada del tren de alta velocidad a Málaga, la sociedad se muestra volcada con el AVE. Un estudio realizado por Renfe indica que siete de cada diez malagueños aseguran que lo utilizarán para viajar. De ellos, el 12 por ciento afirma que lo hará con "mucha" o "bastante frecuencia", según los resultados del informe. Un 20 por ciento dice que no viajará en AVE.

Los residentes en la capital también creen, en su mayoría (un 98 por ciento), que el nuevo medio de transporte será beneficioso para la ciudad. Los cinco principales argumentos que tienen para basar su posición son: una mayor visita turística en Málaga y su entorno, el refuerzo de la imagen de modernidad de la ciudad, la mejora de sus comunicaciones con otros municipios importantes, el incremento de las relaciones comerciales de las localidades con estación de AVE y que el tren significará "un elemento impulsor" de cambios beneficiosos para la ciudad.

El sector donde los residentes malagueños creen que tendrá un mayor impacto el AVE será en el turismo (un 40 por ciento), pero también en la hostelería y los hoteles (un 25 por ciento) y los comercios (21 por ciento). De lejos, con alrededor de un diez por ciento de las opiniones, le quedan la cultura y el ocio, la restauración o el transporte y la comunicación. El comercio, la hostelería o los servicios también son las principales áreas en las que los vecinos de Málaga creen que se creará mayor empleo gracias al tren de alta velocidad.