La mejor forma de empezar el día

Empezar el día con el pie derecho es mucho más fácil si se comienza con un buen desayuno. Los expertos en nutrición señalan que es la comida más importante del día, que debe incluir dosis de cereales, lácteos, fruta y algún derivado de la carne. Así podremos dejar atrás el mal humor y enfrentarnos a la vida con una sonrisa y, por qué no, ganas de comerse el mundo. Si a esta ingesta primordial le sumamos un poco de sol desde una terraza o un ambiente acogedor, la felicidad será casi completa.

La oferta para desayunar en Málaga es amplia y variada, pero el rey del desayuno es sin duda el pitufo, imprescindible en cualquier carta. En el centro de la ciudad han proliferado en los últimos años los establecimientos que presentan ofertas de desayunos completos con precios que giran en torno a los 3 euros. Uno de los lugares privilegiados para tomar la primera comida del día es La Tetería (C/ San Agustín, 9). Al margen de la oferta de café o té más pitufo, incluye en su carta croissants, cereales con frutas, yoghurt, frutos secos y miel o un bol de frutas del tiempo.

La Plaza de la Merced se ha convertido en uno de los lugares favoritos para ir a desayunar en el centro de la ciudad, no en vano todos sus establecimientos se han subido el carro del pack de zumo, café y pitufo o tostada. Uno de los pioneros fue el Café con Libros que cuida al máximo sus desayunos. Una de las particularidades es que además del clásico zumo de naranja, también ofertan el de sandía y melón. Sus precios van del desayuno más barato por 2,40 (pitufo con mantequilla o aceite) hasta el bol de frutas con yoghurt y muesli por 4,60. El establecimiento cuenta con red wifi que puede hacer más útil el desayuno, además de una amplia variedad de prensa y revistas, que pueden ser la mejor compañía en algunas mañanas.

Sobre la Plaza del Teatro Cervantes, cae el sol y ahí se sitúa Canela, un restaurante que no ha querido dejar pasar la oportunidad de dar los buenos días a los malagueños con tres variedades de desayuno. El clásico, que incluye café, zumo de naranja natural y pitufo o crepe; el natural que apuesta por el yogur con miel y el bol de cereales en lugar de la tostada y el desayuno continental, cuyo plato fuerte es el revuelto de jamón y queso acompañado con tostadas. La amplitud de la plaza es un lugar ideal para ir con niños, ya que podrán jugar sin ningún peligro.

Menos sanos, pero sabrosos y clásicos son los churros con chocolate. En el centro, Casa Aranda lleva más de 70 años alegrando las mañanas de sus clientes de "toda la vida". Pero al hablar de churros, una de las calles donde más establecimientos de este tipo coinciden es Eugenio Gross, donde se sitúan La Cacería, que sirve churros y porras desde las 6 de la mañana, Casa Baro y además un pequeño quiosco que por la mañana vende churros y por las tardes patatas fritas.

Los barrios también cuentan con establecimientos en los que desayunar además de placentero, resulta copioso y sobre todo, barato. En el recinto universitario, se encuentra Los Barcos, uno de los lugares favoritos por los trabajadores de la construcción que prescinden del bocadillo en su receso para degustar los molletes de este bar. En el barrio de La Paz, La Gran Plaza (Plaza Mozart) cuenta con una gran variedad de bocadillos, tostadas, zumo de naranja y manzana natural. Además, se puede disfrutar de su terraza todo el año y suele estar ambientado con las señoras del barrio que van a hacer la compra. La taberna El Martinete (Avenida Carlos Haya, 31) responde al concepto antiguo del desayuno con bocadillos grandes y generosos en calidad y cantidad.

Y si un día uno se levanta con ganas de darse un buen homenaje, sin duda la mejor opción es un desayuno bufet en un hotel. En Málaga, por un precio de 13 euros, el hotel Barceló (Estación María Zambrano) permite disfrutar hasta hartarse de su desayuno bufet en el que cuentan con todo tipo de zumos, frutas, bollería, tostadas y elementos tan británicos como el bacon o los huevos revueltos. El hotel NH (Avenida Guadalmedina, s/n) también ofrece esta posibilidad por un precio un poco superior, 14,5 euros más IVA.

Hay opciones para todos los gustos, pero todas tienen el mismo fin: alegrar al estómago y la vida. Así que escoja y disfrute, que cada día puede ser un gran día.