Más de la mitad de los usuarios sufre irritabilidad cuando no tiene el móvil

Los teléfonos móviles deben apagarse por las noches y hay que dejarlos en otra habitación. Así lo recomendó ayer el director de la Unidad de Psicología del centro médico USP Fuengirola, Ildefonso Muñoz, que advirtió de que esta enfermedad puede generar inestabilidad e irritabilidad e incluso falta de concentración cuando se olvidan el teléfono en casa, no tienen cobertura, le queda poca batería o se han quedado sin ella.

Según las últimas investigaciones, alrededor del 53% de los usuarios de teléfonos móviles sufre nomofobia, es decir, miedo a no llevar estos aparatos encima lo que ha levantado la alarma entre la sociedad.

Además, el experto señaló que afecta más al sexo masculino que al femenino. De los encuestados, la mitad reconoce nunca apagar el teléfono móvil, la mayoría por estar en contacto con familiares y amigos y un 10% por trabajo.