Nueve despidos en la Fundación de la Universidad de Málaga por su asfixia económica

De las 101 personas que forman parte de la plantilla de la Fundación General de la Universidad de Málaga (Fguma) salen nueve. En un contexto de crisis económica de la institución de la UMA y en aras de su viabilidad, se ha cerrado el despido de esos trabajadores, uno menos que una decena, lo que supondría un expediente de regulación de empleo (ERE). Según ha podido saber Málaga Hoy, de los nueve, siete ya han firmado la carta de despido con salida este próximo jueves 31 de julio, otro empleado está pendiente de una aclaración sobre su liquidación y a una trabajadora le cortarán la relación laboral en noviembre.

Representantes del comité de empresa –aunque no facilitaron información sobre estos despidos– recalcaron que “todos son por motivos económicos”, para buscar la viabilidad y rentabilidad de la Fundación. Por tanto, tienen la consideración de “objetivos”, puesto que se fundamentan en la difícil situación económica de la institución. La mitad corresponde a profesionales del Departamento de Comunicación y uno del Centro de Idiomas; es decir, trabajadores muy cualificados.

Desde el Sindicato de Apoyo Mutuo (SIAM) se puntualizó que se trata de “despidos pactados” ya que, ante la encrucijada de la Fundación, hay empleados que de forma voluntaria han aceptado su inclusión en la lista de despidos.

Fuentes de cercanas a la Fguma auguraron la dificultad que supondrá ahora, al prescindir de estos profesionales, poder cumplir los cuatro encargos de diversos trabajos administrativos que el rector, Teodomiro López, hizo recientemente a la Fundación. Además, denunciaron que la dirección de la Fundación habría propuesto contratar a los despedidos como fijos discontinuos. Málaga Hoy intentó, sin éxito, conocer la versión de la Fguma.

Estos despidos se confirman solo unos días después de que se anunciara el I Torneo Fguma, que tendrá lugar el próximo 2 de agosto y en el que participarán el CDU Malacitano, el Antequera y el Torremolinos. El CEO y alma mater del Malacitano, Daniel Pastor, está muy vinculado a la UMA, con la Facultad de Económicas y sus profesores. Desde la FGUMA se aseguró a este periódico que no hay contraprestación económica por dar nombre a este torneo novedoso, aunque sí que hay una incipiente colaboración con el Malacitano, como se ha comprobado con estos eventos en la que Daniel Pastor figura como enlace, utilizando a la universidad para legitimar el proyecto del club. Desde la UMA se asegura que la relación con el CD Malacitano es "inexistente".

Otra de las medidas de la Fguma para aligerar la plantilla de la institución es la subrogación de la decena de trabajadores que con el ciclotrón fabrica los radiofármacos para diagnosticar a miles de pacientes en hospitales andaluces de cánceres. Profesionales altamente cualificados que pertenecen al Centro de Investigaciones Médico-Sanitarias (Cimes) de la Fguma. Su subrogación por parte de la empresa encargada de la explotación y distribución de los radiofármacos es una de las medidas del paquete que la dirección de la Fundación prevé proponer en septiembre para que ésta sea viable. Para ello, debe decidirse si la empresa que resulte adjudicataria tiene que asumir a estos empleados del Cimes.

Representantes del comité ya avanzaron a finales de junio que la lista de propuestas para garantizar la viabilidad de la Fguma y hacerla más rentable se presentará a los trabajadores tras la vuelta de las vacaciones.