Nuevos precios de Parcemasa: sube el coste del cementerio en Málaga tras 13 años
La capilla ardiente crece de los 60 a los 200 euros, mientras que los precios medios crecen un 5,7%
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La inflación también llega a uno de las pocas cosas inapelables de la vida, que no es otra que su fin. Más tarde o más temprano todo hijo de vecino acaba pasando por el cementerio y en Málaga el coste de este servicio sube tras trece años congelado. El alza será, de media, del 5,7% respecto a las tarifas vigentes desde 2012. En el mismo tiempo, el aumento del IPC es de un 31,5% en Málaga.
El aumento del coste no llegará, al menos, hasta mayo, ya que pese a que se aprobó inicialmente en 2024, la luz verde que se ha dado este lunes en Comisión de Sostenibilidad, le deberá seguir el visto bueno del Pleno este mes; un plazo de 30 días en exposición pública y volver a recibir el voto positivo del Pleno. Esta moción ha recibido el voto a favor del PP, la abstención de Vox y la negativa de PSOE y Con Málaga.
El mayor de los incrementos (más de tres veces su coste actual) se da en la instalación de una capilla ardiente, que pasa de 60,49 euros a los 200. Por su parte, la inhumación en nicho costará 249,30 euros en caso de contratarse a cinco años, 738 si es a 25 años; 1.346 euros en caso de que se contrate a 50 años. Su mantenimiento al año es de 14,71 euros.
Tanto los osarios como los columbarios a 50 años cuestan 525 euros y la tumba 2.548,70 euros, siempre en el medio siglo (con un mantenimiento anual de 19,63 euros). La fosa familiar cuesta 3.145 euros, mientras que el panteón asciende a los 1.251 euros el metro cuadrado. El coste de mantenimiento anual de la fosa pasa los 24 euros y el del panteón los 68. En caso de querer abrir una tumba, fosa o panteón, se deberá abonar 81,76 euros.
La reducción de restos costará 53,63 euros una vez se aprueben los nuevos precios este año, la cremación de un cadáver, 548 y la incineración de restos, 429. Las tanatosalas, hasta 24 horas, tienen un coste de 156 o 199 euros si son de tipo 1 o 2. En caso de ser "superior" el coste asciende a los 400 euros y, si es dúples, 450 euros. Por seis horas más de cada uno de estos servicios se cobrará 39, 50, 100 y 112 euros, en el orden anteriormente detallado.
También se incluyen nuevos servicios que hasta la aprobación de estos precios no estaban contemplados. Así, por una placa recordatorio en el Jardín de los Recuerdos costará 150 euros; el apoyo por personal de las instalaciones, 91,80 euros; la entrega de cenizas, 30 euros, lo mismo que su manipulación, y en caso de tener que retirar un marcapasos se cobrará 150 euros.
Hay que tener en cuenta que el 80% de los servicios son asumidos por las compañías de seguros de decesos. Es decir, sólo dos de cada 10 fallecidos optan por la inhumación o el entierro. Este incremento medio conlleva que habrá servicios que mantendrán sus precios actuales (nichos, columbarios o inscripciones de títulos para unidades de enterramiento o panteones) y otros que subirán un 15% como los de cremación y tanatorio para adaptarlos al coste de su mantenimiento, aseguran desde el Ayuntamiento de Málaga.
En los últimos años, Parcemasa ha puesto en servicio seis nuevas tanatosalas (ya son 28 las que hay operativas) para dar respuesta a la demanda, un nuevo edificio de Coordinación de Servicios que ha permitido mejorar la atención al público, una sala para la celebración de ceremonias laicas y un gabinete de atención psicológica gratuita por parte de profesionales especializados en traumas y el tratamiento del duelo.
Además, en materia de eficiencia y sostenibilidad cabe destacar la puesta en servicio en septiembre de 2023 del parque fotovoltaico en el cementerio de San Gabriel (Parcemasa) destinado al autoconsumo y que inyecta a la red energía eléctrica suficiente para cubrir la mayor parte de la demanda de las dependencias y servicios del complejo funerario en horario diurno. En esta primera fase, la planta está formada por 1.052 paneles instalados en la cubierta de 38 de los 212 bloques de nichos que componen la necrópolis.
Por otro lado, en junio del año pasado abrió sus puertas el cementerio municipal de animales de compañía para dar respuesta a una necesidad no cubierta desde el ámbito público para todas aquellas personas que buscan un espacio para el descanso de sus animales de compañía. Ubicadas en una parcela del Parque Cementerio de Málaga, se trata de unas instalaciones pioneras en España, ya que el resto de equipamientos similares existentes en otras ciudades son privados. En estos primeros seis meses de actividad, ha prestado 82 servicios entre incineraciones, enterramientos y depósito de cenizas en los jardines habilitados para ello.
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