Un paciente del Hospital Clínico de Málaga, en contra de su alta

El hombre aseguró haber iniciado una huelga de hambre y el centro aclaró que las decisiones las toman los equipos bajo criterios clínicos

El nuevo Hospital de Día Oncohematológico del Clínico de Málaga está acabado, pero sin uso por falta de equipamiento

El paciente con el suero, en el Hospital Clínico.
El paciente con el suero, en el Hospital Clínico. / M. H.

Málaga/Un paciente del Hospital Clínico afirmó haber iniciado una huelga de hambre en contra de su alta. Operado el año pasado de un cáncer de esófago, la semana pasada ingresó por una infección intestinal y "bastante" fiebre. Al acudir a Urgencias le hicieron varias radiografías, un scanner y analíticas. El facultativo que lo atendía en ese área dispuso su hospitalización.

"Ahora me dan el alta. Me quieren echar a la calle, pero yo no estoy curado", esgrimió Ricardo Marín desde su habitación del centro sanitario. Así que aseguró que había iniciado una huelga de hambre. No obstante, tenía el suero puesto, tomaba agua y también bebidas isotónicas.

Mientras él desgranaba sus quejas, el hospital insistió en que las decisiones las toman los equipos asistenciales bajo criterios clínicos y que no podían dar más información por protección de datos dado que se trata de un caso concreto.

Después de las pruebas que le hicieron al ingresar, como tratamiento le pusieron suero, antibióticos y calmantes. "No estoy para irme de alta, este martes tuve fiebre y sigo con molestias. Además, la prueba de sangre oculta en heches ha dado positivo. Si me dan el alta, que me firmen un documento que diga que estoy curado", exigía.

Marín fue operado el año pasado en el Hospital Regional de un cáncer de esófago. Luego recibió dos sesiones de quimio y 23 de radioterapia en el Clínico. "Aquella atención fue correcta y los profesionales, fantásticos. Pero ahora, si protesto me miran como un paciente problemático, pero sólo reclamo una atención adecuada porque no estoy para irme de alta", insistía.

Añadía que no tenía quejas del facultativo que lo atendió en Urgencias, cuya asistencia fue, dijo, "correcta". Pero afirmó que desde su pase a planta lo ha tratado un médico diferente. "No tengo un seguimiento con el mismo profesional", se quejaba. Finalmente, horas después de su protesta, volvió a verlo el facultativo que lo asistió en Urgencias. El jueves finalmente obtuvo el alta, dejó la protesta y ya se encuentra en su casa. Dado que vive solo, señaló que ahora sus hermanos están "pendientes" de él.

stats