Era lo que preveían los expertos: pese al descenso de los contagios a más de la mitad respecto a dos semanas atrás -cuando llegaron a situarse por encima de los 1.700- este inicio de febrero está siendo duro para los centros sanitarios y para numerosas familias, con muchas hospitalizaciones y fallecidos. Este jueves deja 25 víctimas mortales más con el Covid 19. 

¿Por qué si van bajando los contagios hay una cifra alta de óbitos con esta infección? La razón es que hay un efecto dominó que va con retardo. Primero se disparan los casos, luego los ingresos en los hospitales, unos días después las entradas en UCI y más tarde, los decesos. Así que aunque el pico de positivos vaya descendiendo, los efectos devastadores del patógeno continúan unas semanas más. 

Desde marzo pasado, tras las 25 muertes notificadas por la Consejería de Salud y Familias este jueves, han fallecido 1.186 personas con esta enfermedad en la provincia de Málaga. Ello supone que el 1,5% de quienes contraen la infección, no logran superarla.  

La presión asistencial tiende a bajar respecto a las jornadas previas. La Junta informa de 44 hospitalizaciones en las últimas horas. El martes se registraron 74 y el miércoles hubo 72. En los hospitales hay ingresados 849 pacientes con el virus. El día anterior había 861. Pero frente a este ligero descenso, se produce un incremento de la demanda de Cuidados Intensivos ya que el miércoles eran 120 los enfermos en UCI y ahora suman 127. Esta última cifra -la misma que se registró el pasado domingo- es récord desde marzo. 

En total, desde que estalló la pandemia en la provincia, 6.376 personas han tenido que ingresar en un hospital debido a su gravedad. De estas, 520 requirieron atención en una UCI. 

Respecto a los nuevos casos, continúan, con ciertas oscilaciones, estabilizados. Son menos de la mitad que hace casi dos semanas. El último día de enero llegaron a contabilizarse 1.787, el récord de la pandemia. Ahora hay 619 más. Son una cifra sensiblemente menor que la de entonces, pero es algo más elevada que las registradas los pasados lunes (555) y martes (468).

Comparando la tasa de incidencia, ésta ha caído de forma importante como consecuencia de las restricciones aplicadas a la movilidad y los contactos sociales. Hace dos semanas era de 953,6 y ahora se sitúa a nivel provincial en 648,4.

Respecto a los curados, este jueves deja otros 494. Son menos que los 619 nuevos contagios, pero ya casi se van equiparando ambos números. A mediados de enero hubo días, como el lunes 18, en que llegaron a ser diez veces más los positivos (757) que las altas (76).