Un paraíso de coral en las profundidades del mar

Nunca antes hasta ahora se había encontrado coral vivo a tanta profundidad en el mar de Alborán y los científicos aún no salen de su asombro. Ha sido durante una campaña que el Instituto Español de Oceanografía ha llevado a cabo en un pequeño monte submarino, equivalente a dos campos de fútbol, a una profundidad de hasta 450 metros frente a las costas de Málaga y en el que han sido identificadas 157 especies distintas.

Este paraíso submarino se llama El Idrisi y forma parte de un conjunto de cuatro montes que están situados a unos 45 kilómetros de la capital malagueña. No se sabe aún qué superficie ocupa este arrecife natural, para eso habrá que esperar a futuras campañas oceanográficas más específicas, pero sí que se tratan de dos especies bautizadas científicamente como Dendrophyllia cornigera y Caryophyllia sp que sólo habitan en zonas de corrientes de agua fría.

Esto es quizás lo que más ha llamado la atención de los investigadores que han participado en la campaña, ya que se cree que el arrecife encontrado en este monte submarino puede formar parte de una especie de cinturón de coral que discurre desde los fiordos noruegos a una profundidad de 45 metros hasta zonas del océano Atlántico donde se ha detectado a más de 1.800 metros.

Víctor Díaz del Río, científico del Centro Oceanográfico de Málaga, asegura que el hallazgo de coral vivo indica la presencia de ecosistemas "de particular interés y de gran vulnerabilidad", además de una enorme biodiversidad que se refleja en las 157 especies distintas que han sido identificadas, 50 sólo de peces.

Pero la importancia de este descubrimiento va más allá. Los corales son especies de crecimiento muy lento que actúan como "termómetros del pasado" capaces de almacenar sla evolución que ha sufrido el clima durante decenas de miles de años.

Ya se sospechaba que podría encontrarse coral en los montes explorados, aunque todos los estudios anteriores habían dado al traste con esta esperanza porque siempre fueron localizados muertos. Aún se desconoce por qué se han mantenido en este monte y no en los otros tres, pero el investigador explica que sí suele ser normal en estos ecosistemas montañosos por estar menos alterados "por ser un relieve aislado que queda más protegido de los fenómenos oceánicos".

Ahora se abren una cantidad de interrogantes que los científicos deberán ir dilucidando hasta desentrañar los secretos que aún esconde este preciado arrecife de coral.