El programa Mentor 10 se estrenó este viernes en Málaga de la mano del karateca Damián Quintero, seis veces campeón de Europa en la modalidad de katas. Se trata de un proyecto de la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía dirigido a niños en etapa escolar y jóvenes andaluces en el que serán tutorizados por deportistas de élite con el fin de guiar sus pasos en sus futuras carreras deportivas, así como fomentar valores y hábitos saludables.

El programa, que arrancó hace poco más de dos meses en Sevilla, también pretende impulsar el deporte en Andalucía y supone el inicio de un proyecto estratégico que formará a los jóvenes en valores como la superación, el respeto, la igualdad o el trabajo en equipo. Además de Quintero, que participará como mentor de cinco jóvenes, otros diez deportistas de élite de distintas áreas formarán parte del programa: Carolina Marín, José Manuel Ruiz, Fátima Gálvez, Berni Rodríguez, María Peláez, María Pujol, Javier Fernández, Regio Hernández, Blanca Manchón y Lourdes Mohedano.

Junto a Quintero, el consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, presidió el acto, que tuvo lugar en la ciudad deportiva de Carranque. El consejero recalcó la importancia de practicar deporte desde edades tempranas como medida que pueda contribuir a la lucha contra la obesidad infantil, que afecta en Andalucía al 23% de la población. Además, también quiso recordar el aumento de las horas de Educación Física en Primaria con el fin de mejorar la psicomotricidad y generar hábitos de vida saludable.

“Yo creo que lo más importante es transmitir nuestra experiencia a todos estos chicos y chicas, ya que son jóvenes promesas que están llegando y debutando en la Federación Española o la Selección Andaluza en distintos deportes”, señaló Quintero. El malagueño apuntó que no solo les aconsejará en cuanto a la parte técnica, sino también en la personal, la psicológica y la nutricional, para “que sepan gestionar esa presión que pueden sentir en un futuro”.

Las tutorizaciones se realizarán de forma presencial cuando fuera posible o en su defecto por otros medios como llamadas o videollamadas, según explicaba Quintero. “Hablaremos con los chicos y chicas, ellos me podrán preguntar. Por lo menos por mi parte sí que quiero que ellos me cuenten su experiencia, sobre todo algún momento duro que hayan tenido y yo contarles también la mía y que en un futuro no caigan en el mismo error que a lo mejor he podido caer yo y aprendan de eso”, comentó.