Málaga

Multitudinaria protesta del campo en Antequera

Tractorada este jueves en protesta por la situación del sector agrario.

Tractorada este jueves en protesta por la situación del sector agrario. / Javier Flores

Unos 400 tractores se han concentrado este jueves en Antequera para participar en la jornada de protesta por la situación crítica que está sufriendo el sector agrario de Málaga.

Los participantes han comenzado a entrar en la autovía A-92 a la altura de Antequera mediante una marcha lenta que recorrerá un tramo de la vía y que les llevará hasta el recinto ferial antequerano (entre los puntos kilométricos 149 al 151, dirección Granada).

Los convocantes han pedido realizar una jornada tranquila sin incidentes. “No hemos venido a ser héroes”, ha asegurado uno de los portavoces antes de iniciar la marcha.

Además han denunciado la falta de ayudas por parte del Gobierno central y han vuelto a lamentar los ataques que sufren por parte de algunos ministros del mismo.

La tractorada de este jueves ha sido convocada por las organizaciones agrarias Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias de Málaga y afectará al tráfico en las carreteras de Málaga, especialmente en la A-92, por que se han previsto itinerarios alternativos.

Las organizaciones agrarias convocantes decidieron esta protesta "en unidad de acción para intensificar las acciones reivindicativas programadas ante la difícil situación que atraviesa el sector".

"Los precios, la subida de los costes de producción, las novedades sobre reforma laboral, la competencia desleal, la reforma de la PAC y, para colmo, una sequía severa, que asfixia a las explotaciones agrarias malagueñas desde hace varios años, han saturado al sector", advirtieron en un comunicado, al tiempo que agregaron que "se están produciendo abandono de explotaciones, lo que conlleva una imparable despoblación de zonas rurales".

Además, incidieron, "los alimentos siguen encareciéndose en la cesta de la compra para los consumidores, que pagan más por los productos que adquieren". "Un aumento de precios que, sin embargo, no repercute en los agricultores y ganaderos, el primer eslabón de la cadena alimentaria, que ven cómo se incrementan sus pérdidas porque ni siquiera cubren los costes de producción con la venta, mientras que al mismo tiempo llegan a nuestros mercados productos importados de terceros países que no cumplen con los requisitos exigidos en la Unión Europea, ni en calidad ni en seguridad alimentaria ni en su proceso de producción".

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