Quirónsalud Málaga alerta de que el diagnóstico precoz de la displasia de cadera infantil evita cirugías y secuelas
Se estima que la enfermedad afecta entre 1 de cada 100 y 1 de cada 1.000 niños
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El diagnóstico temprano de la displasia de cadera en recién nacidos es clave para prevenir complicaciones y evitar intervenciones quirúrgicas. Así lo advierte el doctor Adolfo Díaz, especialista en Traumatología Infantil del Hospital Quirónsalud Málaga, quien subraya que esta alteración del desarrollo puede derivar en dolor y artrosis precoz si no se detecta y trata a tiempo.
La displasia de cadera es un trastorno en el que el fémur y el acetábulo no se forman correctamente, provocando desde una leve inestabilidad hasta una luxación completa. Aunque es indolora al nacer, puede generar secuelas graves si no se corrige adecuadamente. Se estima que afecta entre 1 de cada 100 y 1 de cada 1.000 niños, pero un diagnóstico precoz permite corregir el problema con tratamientos ortopédicos sencillos y evitar consecuencias permanentes.
El doctor Díaz ha recordado el caso reciente de una niña de seis años intervenida en Quirónsalud Málaga, tras presentar cojera, dolor y cambios estructurales en la cadera que ya no podían resolverse con tratamientos conservadores. “Este caso nos recuerda que un diagnóstico y tratamiento correctos y tempranos son esenciales para permitir un desarrollo normal de la cadera y prevenir complicaciones futuras”, ha destacado el especialista.
La detección temprana, clave para una recuperación completa
Los expertos explican que la displasia de cadera puede deberse a factores familiares, gestacionales o ambientales, y que es más frecuente en niñas y en bebés nacidos en posición podálica. La exploración física y la ecografía de cadera en el nacimiento son fundamentales para identificar el problema y aplicar tratamientos eficaces, como el arnés de Pavlik, que corrige la posición del fémur y favorece un desarrollo normal de la articulación.
“Cuanto más tarde se detecta la displasia, más complejos y menos efectivos resultan los tratamientos”, advierte Díaz, quien recuerda que los casos no diagnosticados a tiempo pueden requerir cirugía y derivar en cojera, dolor crónico o limitación funcional.
El Hospital Quirónsalud Málaga cuenta con un equipo de traumatología infantil especializado en el diagnóstico y tratamiento de esta patología, que aplica técnicas avanzadas y un seguimiento personalizado durante el crecimiento. El doctor Díaz insiste en la importancia de acudir a las revisiones pediátricas periódicas y realizar una ecografía de cadera en bebés con antecedentes familiares o factores de riesgo, con el objetivo de garantizar una infancia sana y activa.
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