Las obras de calle Carretería, después de casi dos años, comienzan a ver la luz. El Área de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga ha informado que desde este jueves se procedería a la ordenación definitiva en este tramo, decretado como zona residencial. Esto significa que los peatones serán los que tengan la preferencia en la vía y que la velocidad máxima será de 20km hora.

A pesar de ello, esta mañana todavía se podía observar que el último tramo de la calle seguía cortado por obras, como durante los últimos tres meses. En la intersección con Ollerías, se ve todavía el largo camino que queda todavía hasta finalizar por completo.

Los comerciantes de Carretería ya no pueden esperar más. Los 18 meses que se preveían inicialmente para la ejecución de la peatonalización de la calle se han superado ya, y se espera que acaben oficialmente antes de acabar el año, en diciembre.

Sin duda, este tiempo de obras ha afectado directamente a los establecimientos de la calle. De los que han sobrevivido, porque han sido bastantes los que han tenido que cerrar, admiten que necesitan ya que acaben, algunos por el ruido que molesta a los clientes y otros porque necesitan recuperar el tránsito que atrae a las personas hasta su local.

"La gente no quiere comer con el ruido de la obra al lado. Hay gente que ha dejado de venir por eso", afirma Marlli Gómez. Al igual que ella, a Yanina le ocurre lo mismo, ya que su establecimiento depende por completo del tránsito peatonal. Con las obras, afirma que "solo pasa la gente que trabaja por aquí, el resto cogen otro camino".

Las consecuencias para estos locales han ido más allá, también en la limpieza. "Las ganas de que acabe esto es meramente por el polvo. También vamos a ganar en el hecho de que va a ver menos tráfico de coches", explicaba Antonio Rodríguez. "Estos meses han estado llenos de polvo, de ruido y aburrimiento", insistía Yanina.

Ahora que la finalización de la obra está más próxima que nunca, Virginia Marto se muestra algo decepcionada con el resultado: "Yo pensaba que iba a ser peatonal como calle Larios, pero al final ni la han puesto peatonal ni nada, todavía pueden pasar los coches" Virginia Marto.

A partir de ahora, informan desde el Ayuntamiento, se aplican normas especiales de circulación. En concreto, la velocidad máxima de los vehículos está fijada en 20 kilómetros por hora y los conductores deben conceder prioridad a los peatones; los vehículos no pueden estacionarse más que en los lugares designados por señales o por marcas y los peatones pueden utilizar toda la zona de circulación.