"Mi salario no es tan elevado para esta bajada"

Manuela Caparrós vive en Málaga pero da clases de Filosofía en Guadix. Es profesora interina. Además de su hipoteca tiene que costearse el alquiler de una vivienda para poder cumplir con un trabajo que "no hace mucho por la conciliación familiar". Ese sistema no le pilla de nuevas, pero lo que no se esperaba era otra bajada del sueldo, esta vez del 15%. "Me parece una injusticia muy grande lo que se está haciendo con los funcionarios y lo que ocurre con los interinos ya esdesorbitado, si me bajan un 15% puedo cobrar 500 ó 600 euros menos que hace cuatro años", dice.

"Para salvaguardar el sistema educativo público se exige un esfuerzo temporal y solidario, pero mientras a mí sin estabilidad, viviendo fuera de casa el tiempo que estimen oportuno, me piden ese esfuerzo, al presidente de la Junta, a los consejeros y demás le exigen un 5%, me parece bastante injusto", subraya Manuela. Y va más allá. Esta interina asegura que su salario "no es tan elevado como para que esa bajada no nos haga un buena mella, más aún, cuando estamos desplazados".

Esta profesora de Filosofía estima que "en cualquier empresa el capital más importante que hay es el humano, hay que cuirdarlo y me parece muy triste que no se haga". También critica la falta de información a un sector afectado en primera persona y se muestra "cansada de que se tire de lo más fácil".

Encarni Illanes y Lucía Ríos son profesoras interinas del IES Serranía, en Alozaina. Ambas quieren mirar el futuro próximo con ojos optimistas pero no aseguran que "la situación en general es bastante negativa". Encarni es profesora de Matemáticas y "tengo la suerte de que se mueve mucho". Por eso, aunque se amplíen las horas de los funcionarios de carrera y disminuyan vacantes y sustituciones, espera "trabajar algo" el próximo curso.

Tampoco quiere ponerse negativa Lucía Ríos, profesora de Geografía e Historia. "Si no es vacantes, al menos con sustituciones espero trabajar, porque delante tengo unos 300 docentes pero detrás tengo muchos más", dice. "La bolsa se va a ralentizar más que nunca, van a llamar a mucha menos gente, porque habrá menos dinero para sustituir, cubrirán las vacantes que surjan, es inevitable, pero sustituciones solo harán las bajas de larga duración, como las de maternidad", presume esta docente.

En cuanto a la paralización de las oposiciones, las tres interinas sienten cierto alivio. "Si consigo la plaza de maravilla, pero si hay oposición y no la consigo es cuando hubiese visto peligrar mi vida laboral", cree Lucía Ríos. Para Manuela "había tantas irregularidades y era algo tan impugnable que no me parecía garantía suficiente sacar una plaza para que en dos años me dijeran que no vale".