El sector turístico ha cerrado el año rozando las cifras de 2019, y aunque los hoteles han visto incrementados los ingresos o la afluencia de público, la rentabilidad de los establecimientos se ha visto afectada por la crisis inflacionista y el aumento de los costes.

El presidente de la Asociación de Empresarios de Playas de Málaga (Aeplayas), Manuel Villafaina, ha valorado que el año 2022 ha sido “bastante bueno”, en el que “el público estaba deseoso por salir, tomar el sol y airearse un poco” tras dos años marcados por las restricciones a causa de la crisis sanitaria de Covid-19.

De este modo, ha señalado que durante el primer semestre del año que ha finalizado, “la gente venía muy alegre y contenta” y “han sido unos meses muy buenos”, pero “con la subida de los productos se ha restringido un poco más”, por lo que se han aminorado las ganancias. Así, ha valorado que el 2022 “no ha sido como 2019”, pero “se asemeja mucho” tras las cifras conseguidas en el sector de la provincia, que ha experimentado un incremento de las ventas del 100% respecto al 2020 y de entre el 30% y el 40% frente a 2021, ha indicado el empresario, además de registrar “mucho más público” que durante el año previo a la pandemia, considerado de referencia por los agentes turísticos.

En cuanto al perfil de los clientes de los chiringuitos, Villafaina ha apuntado que son principalmente turistas internacionales “de mucha calidad” y un poder económico medio-alto, procedentes de Alemania, Holanda, Bélgica, Francia, Italia, Noruega, América o Canadá, mientras que el británico “se está recuperando”. Las perspectivas para 2023 son positivas en el sector, un año que se presenta con “previsiones muy buenas”, pese a que “la guerra nos hace daño, aunque no estamos cerca de la zona” y “viene bastante bien” frente a otros destinos competidores, ha agregado.

Los hoteles de la Costa del Sol también cierran el año con cifras positivas, e incluso rebasando los ingresos o tarifas medias del 2019, como es el caso de los cinco estrellas. El hotel Don Pepe Gran Meliá, localizado en Marbella, ha clausurado el 2022 con “un nivel de ingresos mejor” que el año referente, aunque “con menos ocupación, pero con una tarifa más alta”, ha asegurado la directora, Rocío Galán, quien ha apuntado que “la rentabilidad ha estado más limitada por el aumento de los costes de los suministros y la alimentación”.

En cifras, ha indicado que la ocupación media del año se ha situado en un 70%, lo que supone “2 puntos por debajo de 2019”, mientras que la tarifa media se ha establecido en los “800 euros por día” durante el verano.

Otro de los datos positivos que deja el año que cierra en el establecimiento turístico es “la recuperación del mercado árabe, “se ha consolidado el español”, que ha aumentado “un 170%”;  han crecido otros emisores como Países Bajos o Bélgica, así como “se está recuperando el turismo de congresos” y el flujo de viajeros previo a la pandemia “poco a poco”.

El hotel de cinco estrellas Gran Lujo Puente Romano y el cinco estrellas Nobu Hotel, ambos ubicados en Marbella, han cerrado un año “muy positivo” con una ocupación media superior al 65% y rebasando el 90% durante la temporada estival, siendo “el mercado número 1 el de Reino Unido” y en aumento los de Medio Oriente y el americano , según ha destacado el director, Gonzalo Rodríguez.

Las previsiones para 2023 son “muy buenas” tras calificar el 2022 como un “año récord” a todos los niveles como restauración o alojativo, además de “volver a Marbella los grupos” y haber acogido en las instalaciones del cinco estrellas competiciones deportivas de primer nivel mundial como la Copa Davis, ha recordado. Como novedades, ha apuntado que el resort inaugurará en la primavera del año entrante los restaurantes “Cipriani y Coya”.

El hotel de cinco estrellas Gran Lujo Los Monteros, en Marbella, ha clausurado el año con un balance “bastante positivo”, el cual cerró el pasado mes de octubre para someterse a una reforma integral de la planta hotelera tras ser comprado por Stoneweg en el primer semestre de 2022, según ha declarado su director, Fernando Al-Farkh.

El también representante de la Asociación de empresarios hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos) en Marbella ha indicado que el sector aún no ha recuperado las cifras de 2019, el año de referencia a nivel turístico, ya que la ocupación se ha registrado en 2022 “3 puntos por debajo”, aunque ha matizado que “sí ha aumentado el precio medio”, por lo que "estamos raspando a los números" de cuatro años atrás.

Por otro lado, ha indicado que “el cliente estrella ha sido el nacional” y “se ha recuperado de forma importante el internacional, principalmente el británico y del norte de Europa” tras relajarse las restricciones a los desplazamientos.