La sequía deja sin agua a más de 43.000 cabezas de ganado en Málaga

La sequía está pasando factura a los ganaderos de la provincia de Málaga que un año más se encuentran a las puertas del verano sin agua para abastecer a sus animales. Más de 43.000 cabezas de ganado, la mayoría de ovino y caprino, no tienen garantizado el abastecimiento en los próximos meses a menos que vuelvan a emplearse, como ha ocurrido en años anteriores, los camiones cuba para llevar el agua hasta las explotaciones ganaderas.

El sector ha dado ya la señal de alerta y pide a la Junta de Andalucía una solución definitiva para evitar el cierre de muchas de las explotaciones ganaderas de la provincia que están atravesando por una grave crisis, agravada también por la subida de los precios de los piensos.

El año pasado 42.679 cabezas de ganado tuvieron que ser abastecidas con camiones cubas durante el mes de agosto y la mitad de septiembre por culpa de la sequía que arrastró la provincia. En total, se repartieron 44.000 litros de agua diarios.

Los mayores problemas se están dando nuevamente en la comarca del Guadalhorce, donde hay algunas explotaciones ganaderas que no saben cuánto tiempo más podrán aguantar.

Juan Merino, un vecino del municipio de Coín que se dedica a la cría de ganado ovino, tiene que ir cada día desde su finca situada cerca del arroyo de las Piedras hasta el río Grande para recoger agua. Este ganadero realiza este trayecto de más de tres kilómetros para rellenar su aljibe de 50.000 litros y poder dar de beber a las más de 7.000 ovejas que posee. "Cada día cojo mi tractor con una cuba y voy al río, sino mis ovejas se morirían de sed", explica el ganadero.

Un duro trabajo que tiene que asumir durante casi todo el año ya que en verano la falta de agua le obliga a buscar aquellos afluentes que mantienen el caudal, mientras que en invierno a pesar de que su explotación está cercana al arroyo asegura que está contaminado y prefiere no poner en peligro a su rebaño.

El pasado año no recibió ninguna cuba de emergencia para abastecer al ganado y tampoco tiene muchas esperanzas de que ocurra este año.

No es un caso aislado. María Victoria González está al borde de la ruina y ha tenido que recurrir al agua salada que baja por el canal desde el pantano del Guadalhorce hasta Málaga capital. Durante los dos últimos años no ha tenido más remedio que contratar un camión cuba para poder darle de beber a las 300 cabras de su granja, pero la situación ha llegado a ser insostenible.

"Ya no puedo hacer frente a las deudas y si sigo comprando agua para los animales no podré alimentar a mi familia", aseguró esta ganadera que como otros muchos de la zona demanda una solución urgente.

La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) de Málaga ya ha solicitado ayudas económicas a las distintas administraciones para poder garantizar el abastecimiento de las granjas más afectadas por la sequía. Pero, de momento, sólo la Diputación Provincial de Málaga ha confirmado que otorgará una subvención de urgencia de 12.000 euros, al igual que hizo el año pasado, para hacer frente a esta preocupante situación por la que atraviesa el sector.

El secretario provincial de la organización agraria, Juan Antonio García, calcula que con este dinero habrá suficiente para abastecer al ganado durante solamente un mes, ya que cada animal necesita una media de cinco litros de agua al día para sobrevivir.

Los ganaderos malagueños han llamado a la puerta de otras administraciones en busca de ayuda, aunque por ahora ninguna se ha pronunciado al respecto. "La Delegación Provincial de Agricultura y Pesca es la que verdaderamente tiene las competencias para solucionar este problema y garantizar el abastecimiento de agua potable a las explotaciones ganaderas que están completamente abandonadas", explicó.

También el diputado provincial de Medio Ambiente, Miguel Esteban (IU), pidió la implicación de la Junta de Andalucía "creando una infraestructura estable que permita la continuidad de muchas explotaciones ganaderas de la provincia que de otra forma terminarán por desaparecer".