La subida que el precio de los materiales de construcción y de la mano de obra del sector vienen sufriendo en los últimos meses se va a dejar notar de manera clara en las arcas del Ayuntamiento de Málaga y, en particular, en sus previsiones de inversión para la construcción de una promoción de viviendas de protección oficial (VPO) en la calle Ingeniero José María Garnica, donde se contemplan 35 pisos de aprecio asequible.

Con este propósito, la Sociedad Municipal de Vivienda abrió el 7 de noviembre de 2017 un concurso para adjudicar la intervención por un valor cifrado en 3.175.665 euros (IVA incluido). El proyecto quedó en aguas de borrajas ante la renuencia de las empresas constructoras a optar al procedimiento, al parecer, por el desajuste de los valores de ejecución.

Ahora, para evitar un nuevo revés en esta operación residencial, los responsables municipales contemplan en el marco del nuevo presupuesto municipal para 2019, ya en vigor tras su tramitación plenaria, una revisión de los precios de construcción que supone un incremento de casi 700.000 euros respecto al valor inicial.

En concreto, de acuerdo con lo expuesto negro sobre blanco en el documento oficial, la inversión de la que habla ahora el Ayuntamiento para acometer esta obra es de 3.854.511 euros, frente a los ya mencionados 3.175.665 euros. Asumida esta variación en presupuestaria, la intención de la Sociedad de Vivienda es la de volver a salir al mercado antes de concluir el ejercicio. De no variar las condiciones técnicas de la actuación, el plazo que se manejaba para el desarrollo de la promoción es de 24 meses. Es decir, que en el mejor de los casos no estaría lista para su ocupación antes de finales de 2021.

La parcela sobre la que el Ayuntamiento pretende levantar esta promoción se localiza a apenas unas decenas de metros de la actual sede de la Gerencia de Urbanismo y comparte espacio con un hostel impulsado por la empresa Maconext Hospitality, que se encuentra en avanzado estado de ejecución.

Siendo el más elevado de los ajustes contemplados en las cuentas municipales de este año no es el único. De menor entidad son otros previstos para las promociones de calle Zurbarán (8 VPO) y Camino San Rafael (7 VPO), en ambos casos también por "el incremento de los costes de algunos materiales y de la mano de obra durante 2018". Se da la circunstancia de que estas dos actuaciones residenciales ya fueron objeto de adjudicación, si bien los contratos tuvieron que ser resueltos ante la inacción e incapacidad de las firmas adjudicatarias. Por ello, la intención es que en los meses que restan para completar el año se licite la reactivación de las obras.

De acuerdo con la explicación recogida en los presupuestos municipales de 2019, las partidas asignadas a la Sociedad Municipal de Vivienda permitirán seguir avanzando en la ejecución de 54 viviendas ya iniciadas (Calvo y Villazo Bajo), activar el arranque de los trabajos en otras 78 viviendas sociales (Zurbarán, San Rafael, Garnica, Maqueda y González Edo) y culminar los trámites pendientes de otras promociones que suman 1.015 pisos (Rosaleda, Haití y Universidad).