Aún se esperan lluvias durante la semana, pero el temporal ya se ha dejado notar en las playas de Málaga. Frente al Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso, a poco que se observe, es más que evidente que el mar ha devorado gran parte de la arena que hasta hace pocos días rodeaba los chiringuitos de la zona, dejando al aire la estructura o canalizaciones y tuberías que normalmente son invisibles al quedar sepultadas por la arena. 

Desde la Delegación de Costas están pendientes de que el temporal pase y el medio natural se asiente por sí mismo antes de evaluar costes de pérdidas, daños y reparaciones necesarias. Como tras cada temporal, las socavaciones en el litoral son evidentes, si bien la propia acción de la naturaleza suelen suavizar los daños que, justo tras el paso de las inclemencias, son muy evidentes. Es por ello que, una vez haya vuelto la estabilidad al tiempo de la zona, será necesario actuar en el litoral para devolver la normalidad a las playas y a los chiringuitos. 

De momento, no parece preocupar demasiado a los empresarios de playa, según Manuel Villafaina, presidente de la Asociación de Empresarios de Playa de la Costa del sol (Aeplayas), tienen la vista más puesta en la vuelta a la normalidad de las lonjas malagueñas que en los desperfectos. "Tenemos que coger todos los datos en consonancia con los ayuntamientos, que se enviarán a Costas para solucionarlos", avisa. Aunque han habido destrozos en varios puntos de la geografía costera de la provincia podían preverlos "ya más o menos lo sabíamos, a la administración le hemos dicho que no se puede estar de brazos cruzados: las playas para el turismo son importantísimas y hay que regenerarlas con arena o lo que sea necesario y poner los espigones donde sea necesario". 

De cara a Semana Santa, sin embargo, no se muestra intranquilo, "parece que el viento de levante se viene abajo y, si no hay otro temporal, en Semana Santa podemos estar todos a disposición el público". Cabe recordar que este mes ya ha llovido cuatro veces por encima de lo habitual en la provincia –208 litros por los 52 que precipitan de media–.

Sí que les está afectando la huelga de transportistas y de pescadores por la subida del combustible. "Hay pocos servicios y no podemos comprar lo que nos gustaría, si ahora en vez de comprar una caja de boquerones tenemos que comprar media de estar todos abiertos no habríamos tenido producto". 

En todo caso, este miércoles se pone la flota en marcha, lo que puede suponer un alivio para los hosteleros a partir del jueves, "mientras estamos trayendo los productos de Castellón o de Almería, que sí están faenando y se puede ir y volver en coche".