El viento que sopla de levante vuelve a sumir bajo las aguas del mar parte de las playas de la provincia de Málaga. Si bien a fecha de hoy es imposible detallar el grado de afección que el nuevo temporal está teniendo sobre el litoral, los datos aportados por la Dirección General de Costas y por los propios ayuntamientos indican que son casi una veintena las playas que presentan un peor estado como consecuencia de la ventisca.

Las fuertes rachas de viento que asuelan la costa desde el pasado sábado, que han llegado a alcanzar los 54 kilómetros por hora en ciertos puntos y con olas de hasta tres metros de altura, se mantendrán previsiblemente hasta mañana, momento en el que el departamento dependiente del Ministerio de Medio Ambiente comenzará a analizar municipio por municipio las pérdidas que ha traído consigo este mal tiempo.

De acuerdo con la información suministrada, las playas en las que el efecto ha sido mayor son recurrentes. Como viene siendo habitual cada vez que se produce un temporal de levante, Ferrara, en Torrox, es una de las grandes damnificadas. Ya el pasado mes de diciembre, la arena de esta localización llegó a desaparecer por completo tras rachas de viento de hasta 62 kilómetros y olas de más de dos metros de altura, que arrancaron las duchas y las tuberías de abastecimiento.

En Málaga capital, la concejal de Playas del Ayuntamiento, Teresa Porras, informó de que los técnicos de su departamento han observado afecciones sobre las Guadalmar, los Baños del Carmen y La Caleta, que también a finales del pasado año se vio seriamente mermada. En este último caso, las imágenes hablan por sí solas, ya que las olas llegado casi hasta el paseo marítimo.

Otras dos playas afectadas son las de Fuentecilla y Casablanca, en el término municipal de Marbella. Según el edil de Medio Ambiente de esta localidad, Antonio Espada, en estos puntos "se ha perdido la poca arena que había", al tiempo que explicó que la intención del Consistorio es hablar con la Dirección de Costas para concretar cuándo se producirán los nuevos aportes de arena.

Cuatro son las zonas del litoral de Benalmádena que han resultado dañados por la ventisca: Torremuelle, Santa Ana, Punta de la Gaviota y los Maytes. Mientras, en la parte oriental de la provincia, además de los efectos causados sobre Torrox, cabe destacar los daños detectados en Vélez-Málaga, con las playas de Chilches, Benajarafe, Mezquitilla y Lagos, así como en la desembocadura del río Vélez; en el Playazo, en Nerja, y en Torre de Benagalbón, con la playa del Arroyo de Granadilla.

No obstante, la incidencia del temporal en esta ocasión se antoja menos dramática que en años anteriores, puesto que Costas ya tenía previsto intervenir en buena parte de las playas afectadas con nuevos aportes de arena de cara a la Semana Santa. En concreto, este organismo tiene proyectado desde hace algunos días el inicio de trabajos de regeneración en seis zonas del litoral malagueño: Ferrara, en Torrox, con unos 20.000 metros cúbicos; La Caleta y Guadalmar, en Málaga capital; Arroyo de la Miel, en Benalmádena, y Fontanilla y Casablanca, en Marbella. La cantidad de arena que se pretende aportar es de 100.000 metros cúbicos. Sin embargo, en función del estudio de los daños que se realice en los próximos días, el número de intervenciones podría aumentar.

El comienzo de estas tareas, según indicaron desde Costas, está a la espera de "los últimos flecos administrativos", aunque confiaron en que pueda ser realidad a finales del presente mes. A partir de ahí, la idea es que las actuaciones se vayan desarrollando hasta el próximo verano. El contrato fue adjudicado a la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrado por Contrat y Aristerra.