Una quincena de grupos de izquierda han celebrado esta tarde una concentración en la Plaza de la Constitución de Málaga para “mostrar su solidaridad con el pueblo de Cataluña y sus presos políticos” a la que han acudido unas 200 personas. En mitad del acto, una quincena de ultraderechistas han irrumpido vociferando insultos y gritos patrióticos por la calle Especería y se han generado momentos de tensión entre ambos bandos.
Los ultraderechistas –el mismo grupo que ya intentó reventar la manifestación del Primero de Mayo precisamente en la misma Plaza de la Constitución– se disolvieron y unos minutos más tarde volvieron a enfrentarse a gritos con los asistentes en la concentración desde el Pasaje de Chinitas. La destacada presencia de agentes de policías nacionales –cuatro furgonetas y una veintena de efectivos– y locales ha impedido que hubiera más problemas.
La concentración fue convocada a las 20:00 por grupos republicanos de izquierda como Alternativa Republicana, Anticapitalistas, Círculo Marxista Universitario o el Sindicato Andaluz de Trabajadores, entre otros colectivos. Había personas de todas las edades e incluso dos señores mayores llevaban una bandera catalana a la espalda. También había banderas andaluzas y republicanas. Cantaron la canción L’estaca de Lluis Llach, entre otras, y leyeron un manifiesto. “Manifestamos que el libre y pacífico ejercicio del derecho de autodeterminación, ejercido de manera ejemplar y pacífica por el pueblo de Cataluña en la jornada del 1 de octubre de 2017, no puede ser motivo de sanción penal alguna en un país que verdaderamente se rija por principios democráticos”, han asegurado en ese documento. Los concentrados han pedido la amnistía para los “presos políticos catalanes” y han considerado la sentencia del Tribunal Supremo del procés “brutal y antidemocrática”. Los manifestantes de izquierda han aprovechado la ocasión, una vez más, para exigir la república y han lanzado gritos como “la solución es la autodeterminación” o “no a la represión”.
El grupo ultra, por su parte, ha gritado frases como “catalanidad es hispanidad”, “España una y no 51” o “no nos engañan, Cataluña es España”. En algunos momentos se han calentado las dos partes y mientras los de izquierda decían “exhumación” –en relación a los restos del dictador Francisco Franco– los ultraderechistas les han lanzado insultos. La concentración se ha disuelto de forma pacífica.
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