Si la niebla densa que desde el martes no deja ver el sol y ha mantenido a raya los termómetros con temperaturas bastante frescas para esta época del año, hoy la situación cambiará de forma radical. El viento de terral vuelve a Málaga capital y su entorno y los termómetros pasarán de los apenas 24 grados de máxima que registraron ayer a los 35 que se esperan para hoy.
El viento del noroeste vuelve tras los 34,4 grados que dejó el pasado domingo en la capital y lo hará cargado de calor disipando de golpe la densa niebla que ha estado dos días instalada en el litoral.
La neblina se fue disipando ayer por la tarde cuando el viento comenzó a cambiar a poniente y a partir de la pasada madrugada es cuando se esperaba que entrara el terral haciendo que los termómetros se disparen solamente en Málaga. En el resto de la provincia no habrá cambios significativos de las temperaturas, sí en el interior donde bajarán ligeramente.
El ambiente fresco que el viento de levante ha mantenido desde el lunes toca a su fin como también la niebla de estos días que se ha debido a un fenómeno habitual en esta época llamado inversión térmica. Según explicó el jefe de predicción del Centro Meteorológico de Málaga, Fausto Polvorinos, se suele producir después de unos días de altas temperaturas como ocurrió el pasado fin de semana y de repente entra viento húmedo del mar. La capa de aire cálido queda entonces atrapada por la humedad formando esa densa neblina durante la noche y que normalmente desaparece durante el día.
Pero en esta ocasión la humedad ha llegado incluso a alcanzar el 90% en las zonas más cercanas al mar, por lo que la niebla se prolongó más tiempo del habitual llegando incluso el pasado martes a los municipios del valle del Guadalhorce.
Eso hizo que durante buena parte de la mañana del martes e incluso ayer las temperaturas no pudieran pasar de los 20 grados hasta bien entrado el día. Ayer por la mañana la humedad ya se había reducido al 70%, pero aún así fue un valor muy alto para esta época del año.
Para los próximos días, el tiempo seguirá marcado por el viento de poniente. Es decir, las temperaturas no bajarán demasiado de los 30 grados e incluso podría repetirse algún otro capítulo de terral mañana o el sábado. También podrían aparecer algunas nubes, pero serán de tipo medio y alto y no impedirán al sol seguir luciendo.
De momento, no se ha activado la alerta amarilla, aunque no se descarta si la previsión de los 35 grados se supera.
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