El tribunal programa el inicio del juicio para el 27 de septiembre

El tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Málaga que preside el magistrado José Godino ha previsto que el juicio por el caso Malaya comience el próximo 27 de septiembre. De hecho a través del auto que confirma la conclusión de este sumario y acuerda la apertura de juicio oral cita para las 10:00 de la mañana de ese día a abogados y acusados en el procedimiento. No obstante, hace la precisión de que la vista oral dará comienzo en esa fecha siempre y cuando el desarrollo de los trámites que todavía están pendientes de realizar lo permitan.

El juicio arrancará con 95 procesados sentados en el banquillo de los acusados, después de que se haya declarado la rebeldía de los ex concejales Carlos Fernández y Francisco Javier Lendínez, así como del empresario José Manuel Carlos Llorca. Además se ha determinado la extinción de responsabilidad penal por fallecimiento de otros tres implicados. El tribunal ha dado un plazo de 30 días naturales a la Fiscalía Anticorrupción y a las acusaciones particulares para que presenten los escritos acusatorios y, seguidamente, dará otro plazo también simultáneo a todas las defensas para que califiquen.

Respecto a los asuntos en los que la Fiscalía aprecia indicios de nuevos delitos y sobre los que la sala acuerda deducir testimonio para investigar en procedimientos separados, el tribunal precisa que aunque había considerado inicialmente que gran parte de las conductas a enjuiciar podían estar relacionadas con todos o parte de los procesados es "imposible en este momento individualizar tales conductas". Incluso en enero de este año recogía en otro auto que ante la amplitud de los hechos supuestamente ilícitos y "lo dilatado de la instrucción han ido surgiendo nuevos informes policiales que han aconsejado la formación de distintas piezas separadas susceptibles todas ellas, desde luego, de enjuiciamiento conjunto como se va a hacer", pero sin nuevas inclusiones "pues tampoco puede mantenerse abierto un proceso penal indefinidamente".

Ahora considera que el límite ha llegado. Incluso hace alusión al "carácter mastodóntico de este macroproceso" para determinar que ya no pueden tener cabida en el sumario de Malaya hechos nuevos o derivados de otros anteriores, ni nuevos procesados. Por eso ha decidido que se deduzca testimonio para que se abran investigaciones judiciales separadas, porque en caso contrario el juicio del caso Malaya sería "ingobernable" e "imposible de celebrar".

El tribunal, presidido por José Godino y compuesto también por Rafael Linares y Manuel Caballero Bonald, este último en sustitución de la magistrada y ex delegada de la Junta Aurora Santos, reconoce que la apertura de casos aparte somete a los procesados de Malaya que se ven también implicados en esos asuntos a una "nueva e indeseada pena de banquillo en otros procedimientos con el consiguiente costo personal, familiar y económico". Sin embargo, recuerda que hay muchos acusados a los que únicamente se les imputa un hecho puntual que desde hace casi cinco años "vienen soportando ese mismo costo, no pudiéndoseles ahora exigir uno adicional" derivado de las nuevas investigaciones.

También justifica en la voluminosidad del caso que se den plazos comunes para que califiquen las acusaciones y después para las defensas, en vez de hacerlo de forma sucesiva como es habitual. La sala explica que "si los plazos fuesen sucesivos exigirían 10 años para la instrucción y 10 años para la calificación periodo de tiempo que resulta disparatado e inasumible".