"Para atraer al turista chino España no debe ofrecerle sol, sino cultura y gastronomía"

El embajador de China cree que hay que hacer paquetes turísticos "diferentes a los de los nórdicos" para captar viajeros de su país y destaca la "gran potencialidad" del sector

El embajador de China, Zhu Bangzao, en un momento de su intervención.
El embajador de China, Zhu Bangzao, en un momento de su intervención.
Javier Gómez / Mijas

13 de noviembre 2009 - 01:00

No había ningún escéptico en el auditorio pero, por si acaso, el embajador de China, Zhu Bangzao, disipó ayer con cifras cualquier duda sobre el peso específico de su país en la economía mundial y sobre su futuro papel de alternativa al poder hegemónico de EEUU. Del crecimiento económico que se registrará este año en todo el mundo en un contexto de crisis en occidente, Naciones Unidas atribuye al gigante asiático la mitad. La República Popular China cumplió en octubre su sesenta aniversario y la mayor parte de la intervención del diplomático en el Foro Málaga Hoy, patrocinado por Cajamar y celebrado en el Centro Integral de Industrias del Ocio (CIO) de Mijas, giró sobre el progreso de su país desde 1952, de cuando datan sus estadísticas macroeconómicas.

Desde entonces el Producto Interior Bruto chino se ha multiplicado por 77 y su renta per cápita por 18, gracias a la potencia de su comercio exterior, que se ha multiplicado por 2.000 y representa más del 8% del comercio mundial. Se trata del primer país exportador del mundo y el tercer receptor de inversión extranjera, aunque su desarrollo más acelerado se ha producido en los últimos treinta años, en los que su riqueza ha crecido a un ritmo anual del 9,8%, el triple del promedio mundial.

Una de las prioridades del Estado chino es acabar con la pobreza. Si en los setenta una cuarta parte de su población vivía en niveles de pobreza, esa cifra es ahora sólo del 2%. Aunque sigue siendo mucha gente. "El camino de reformas y apertura ha sido acertado, pero tenemos que ser conscientes de que a pesar los grandes éxitos, al tener una inmensa población de 1.300 millones de habitantes la brecha aún es grande", destacó Zhu Bangzao, al recordar que China "sigue siendo un país en vías de desarrollo" y que la renta per cápita en 2008 fue de unos 3.125 dólares, "el 10 por ciento de la española".

El embajador hizo hincapié en que el desarrollo económico de su país es "beneficioso" y una "gran oportunidad" para el resto de países, y se postuló por un mundo "pacífico, armónico y abierto a la cooperación". "China promueve la paz mundial a través de su propio desarrollo, y creemos que nuestra apertura al exterior genera un beneficio recíproco y un intercambio económico y de cooperación. La justicia, la tolerancia, la buena vecindad y las relaciones amistosas son nuestros valores"

España es, a su juicio, un "buen ejemplo" de todo lo anterior. "En los últimos años he sido testigo de la aceleración de nuestras relaciones bilaterales, del fortalecimiento de nuestra confianza y de la expansión continua del comercio bilateral", apuntó. Así, China se ha convertido en el primer socio comercial de España fuera de la Unión Europea, aunque nuestro país sólo es el sexto país europeo en sus relaciones con el gigante asiático. Sin embargo, Bangzao destacó que la "base de la relación es sólida y la voluntad sigue siendo muy fuerte" para promover la cooperación económica y cultural una vez superadas las dificultades de la crisis financiera internacional, por lo que auguró un "horizonte brillante" en las relaciones de ambos países y aseguró que España "se perfila como el mejor amigo de China dentro de la UE".

Una de las principales relaciones económicas a fomentar es la turística. Y ante un auditorio compuesto por empresarios y dirigentes políticos de la Costa del Sol, no podían faltar las preguntas sobre un sector en el que hay "mucho camino para la cooperación". Las cuestiones fueron formuladas y moderadas por Ignacio Martínez, director adjunto de Publicaciones del Grupo Joly, y todo el coloquio contó con un servicio de traducción simultánea. Bangzao también echó mano de las cifras y destacó la importancia de la apertura política para que su país se convierta en uno de los grandes emisores y receptores de viajeros. De hecho, sus previsiones son convertirse en líder mundial muy pronto, en el año 2015. Pero en 2008 China recibió sólo 24 millones de turistas extranjeros y 46 millones de sus ciudadanos viajaron al exterior. Una cifra enorme, como todo lo referente al gigante asiático, pero que se queda principalmente en su continente. Sólo el 5% viajó a Europa. "En el caso concreto de España, los turistas chinos son aún relativamente pocos, sólo vinieron 870.000 personas, mientras que 130.000 españoles visitaron nuestro país", dijo el diplomático. Pero añadió que todo esto habla de la "potencialidad" y del camino por recorrer.

En su opinión, las "enormes posibilidades" de desarrollo del turismo entre ambos países pasan por mejorar varios aspectos. Ambos países tienen que aumentar su promoción como destino. "España ha hecho un gran esfuerzo, por ejemplo, con su amplia presencia en la Exposición Internacional de Shangai de 2010, lo que será muy beneficioso para su imagen como destino ideal". ¿Pero qué buscan los viajeros chinos? Ni el sol y playa ni el golf, pues su país cuenta con excelentes campos y el sol no es algo que atraiga especialmente. "España debería elaborar productos turísticos específicos para los chinos, no los mismos que se ofrecen por ejemplo a los nórdicos, a los que les mueve el sol y playa. A los chinos les interesa más la cultura, el patrimonio histórico y la gastronomía. El paquete turístico que se ofrezca a los chinos debe ser diferente al de los europeos", subrayó Bangzao. Y como en el resto de su intervención y en respuesta a las preguntas de los asistentes, el embajador insistió en la importancia de la colaboración. "Hay que afianzar la cooperación entre nuestras instituciones turísticas. Por ejemplo, podríamos aprovechar este magnífico centro de formación -en referencia al CIO- para traer estudiantes chinos que aprendan hostelería. Eso a su vez atraerá turistas chinos en el futuro", dijo ante la mirada de aprobación del alcalde de Mijas, Antonio Sánchez.

No obstante, queda mucho por hacer. El embajador de la República Popular China afirmó que hace veinte años "nadie podía imaginar los cambios registrados en nuestras relaciones y desarrollo turístico, y en los próximos veinte años seremos testigos de un desarrollo mucho mayor".

stats