Los universitarios son los más interesados en crear una empresa

Los licenciados universitarios son, en estos momentos, los más interesados en crear empresas en la provincia de Málaga, seguidos de los que tienen la formación profesional en su currículo. Así se recoge en el Termómetro del Emprendedor correspondiente al segundo semestre de 2015 que fue presentado ayer y en el que se indica cuál es el perfil de las 366 personas que acudieron a las oficinas de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga (AJE) y del Instituto Municipal para la Formación y el Empleo (IMFE) para pedir asesoramiento entre julio y diciembre del año pasado.

El nivel de estudios de los futuros emprendedores ha variado en los últimos años. En 2009, 2010, 2011 y 2012, coincidiendo con los años duros de la crisis y la caída en barrena del sector de la construcción, la mayoría de los asistentes a estas oficinas interesándose por crear una empresa solo tenían el graduado escolar, el bachillerato o formación profesional. Desde finales de 2012 los licenciados universitarios empezaron a destacar en las estadísticas, alcanzando el 37,6% de los emprendedores en el segundo semestre del año pasado.

Sí hay varios elementos que se suelen repetir informe tras informe. El primero de ellos es que la mayoría de las personas atendidas por la AJE y el IMFE están en el paro, afectando al 60% de las mujeres y al 40% de los hombres. Eso trae consigo que la principal motivación para crear una empresa, acaparando la mitad de los casos, sea generar un puesto de trabajo propio. Esta motivación del autoempleo se repite en la primera posición desde el año 2012, mientras que antes se valoraba más ser el jefe o la existencia de una oportunidad de negocio. No obstante, también hay personas que ya tienen otras compañías, que son empleados por cuenta ajena e incluso estudiantes que muestran su interés por el mundo empresarial.

A la hora de poner en marcha una compañía, del tipo que sea, es clave que haya una oportunidad de negocio, tener alguna ventaja competitiva que le haga mejor que otro en algún concepto y eso permita captar clientes. Es la principal motivación de uno de cada cinco emprendedores, mientras que un 10% quiere animarse a emprender para obtener un ingreso extra.

Los sectores más demandados suelen ser siempre los mismos, por lo que el ansiado cambio de modelo productivo que reclaman los expertos desde hace años tendrá que seguir esperando. Los hombres se interesan principalmente por abrir negocios relacionados con la hostelería, el comercio, la publicidad y los servicios, mientras que en el caso de las mujeres prevalecen el comercio, la hostelería, los servicios sanitarios, el turismo y la estética y belleza, que vuelve al quinto lugar entre las preferencias tras haber quedado relegado en los años anteriores.

Otros aspectos a tener en cuenta en este perfil subrayan que la edad media del emprendedor es de 34 años en los hombres y 37 en las mujeres y la principal dificultad esgrimida por ambos a la hora de poner en marcha una compañía es conseguir la financiación, aunque también aparecen como barreras no saber por dónde empezar, la existencia de numerosos trámites, la dificultad para buscar clientes o para elegir una buena oportunidad de negocio.