Pese a que el calendario marca julio y los malagueños hacen uso en esta temporada de sus playas para refrescarse y sobrellevar un poco mejor las altas temperaturas, la de Sacaba ha permanecido este miércoles con una estampa poco habitual. La rotura de una tubería que anegó la barriada de aguas fecales llevó al Ayuntamiento a prohibir el baño en esta playa tras la recomendación de la Consejería de Salud. 

Esta medida es temporal y como mínimo durará 48 horas desde el momento en el que se decretó -este martes por la tarde-, tiempo en el que la Junta obtendrá el resultado del análisis de aguas, según ha informado a este periódico la concejala de Playas, Teresa Porras. 

El Consistorio malagueño insiste en que se trata de una medida preventiva, ya que los estudios llevados a cabo por Emasa no señalan indicios de contaminación.

En el barrio tratan de recuperar la normalidad. Las calles, ya prácticamente limpias. Si bien, los vertidos fecales han dejado algunos estragos, como el olor "insoportable" que se respira en el barrio o los daños materiales que ha dejado a su paso.

Rafael Torre lo sabe bien y es que su coche ha sido uno de los afectados por la inundación. "Abrí el maletero y me di cuenta que el agua llegaba hasta la palanca de cambios", cuenta. Sin pensarlo dos veces, Torre se adentró en la "sopa" de vertidos para tratar de salvar su medio de transporte. "Había hasta restos fecales", recuerda. El coche de su hijo se encontraba prácticamente en la misma situación. 

El coche de uno de los vecinos inundado por aguas fecales.

El interior del coche anegado de vertidos fecales.

Ahora, ambos están a expensas de que un profesional valore los daños de los turismos y que "la compañía aseguradora de la empresa de construcción -causante del accidente- se haga cargo de los gastos", manifiesta Torre, al tiempo que confiesa: "Si el mío queda inservible, me han destrozado la vida".

Aunque se trata de un Ford Fiesta color verde con doce años de antigüedad, Torre indica que solo tiene 65.000 kilómetros, "es un coche nuevo", apunta. "Si me lo valoran en un precio bajo no sé qué voy a hacer porque estoy en desempleo", lamenta.

Ocurrió este lunes, sobre las 19:00 horas. Una tubería sufrió una rotura en la zona de Sacaba y los alrededores quedaron inundados de las aguas fecales que transportaba. Este accidente se produjo a consecuencia de unas obras que se están llevando a cabo en el entorno. La rotura de la impulsión de la estación de bombeo de aguas residuales afectó al acceso de Sacaba Beach y al tráfico de vehículos. "En cuestión de 12 minutos muchos coches estaban ya anegados de agua", contaba a este periódico el presidente de la asociación de vecinos de la zona, Fernando Rueda.