La vida escolar que guía el deporte
Junto al IES Universidad Laboral, en la Residencia Andalucía viven 371 estudiantes y casi el 50% son deportistas Entrenan y asisten a clase esperando dar lo mejor de sí mismos
Son jóvenes, estudiantes de Secundaria y Bachillerato, compañeros de litera en la residencia y, quizás por encima de todo, deportistas. El esfuerzo, las horas de entrenamiento, la disciplina y la competición son el denominador común de casi la mitad de los 371 alumnos que viven en la Residencia Andalucía, uno de los tres centros públicos que gestiona la Junta en la provincia. Junto al instituto Universidad Laboral, estas dependencias se convierten en un hogar de lunes a viernes y, para estos futbolistas, nadadores o atletas, lo más parecido a un centro de alto rendimiento o una concentración permanente. Tienen entrenadores, monitores que velan tanto por sus marcas como por sus exámenes y médicos que cuidan de su salud. Les falta, a veces, el calor cercano de sus familias pero vivir su pasión junto a sus iguales también les aporta beneficios.
En este centro, se alojan 70 futbolistas de la cantera masculina del Málaga C. F. de todas las categorías, infantil, cadete y juvenil. Y otras tantas alumnas del equipo de fútbol femenino. Todos estudian en la Universidad Laboral o en el colegio Alfonso X y viven aquí porque sus familias son de otras provincias andaluzas o de pueblos de Málaga más alejados. Ernesto Juskevicius es lituano pero lleva desde los 15 años en Almería. "Llevaba tres años jugando al fútbol, me vio un ojeador y me trajo al Málaga", dice este joven de 16. Éste es su cuarto curso en la residencia y cursa primero de Bachillerato. Juega en juvenil y lo convoca la selección andaluza, por lo que "falto de vez en cuando a clase". Un autobús recoge a cada grupo para llevarlos a los distintos campos de entrenamiento y un día del fin de semana siempre tienen partido. En el centro, un monitor cuida de que todo vaya bien.
"Es difícil vivir lejos de casa, echo de menos la comida de mi madre y también a mis amigos", dice su compañero Pablo Montes, también almeriense. Alejandro Bautista, de 14 años, destaca que "cuando te sale un mal partido o te dejan en el banquillo no tienes el apoyo de la familia y no es fácil". En cuanto a los estudios, los jóvenes destacan que tienen las mismas horas y exigencias que sus compañeros no deportistas y "necesitamos que nos entiendan, que si tenemos un partido o una concentración no son excusas". Agustín Rodríguez, director de la residencia, destaca que "sería necesaria una adaptación curricular para deportistas, aunque esto es algo que tiene que hacer la Consejería de Educación, no lo puede hacer el centro".
Eso sí, aunque a veces sea duro hacer compatible los estudios y el deporte, hay ejemplos que sirven de guía e inspiración a los chavales. "Ahora tenemos a dos jugadores en el Málaga que han estado aquí y son de la cantera, Juanpi y Pablo Fornals", agrega el director del centro. Aunque también son muchos los que se quedan en el camino. "Aquí estamos todos en la misma situación y eso te hace madurar, en casa sería un bala perdida en la calle", comenta Alejandro. Todos estos chicos tienen una beca deportiva de la Junta de Andalucía que financia su estancia y sus estudios. También los nueve nadadores que están internos bajo la supervisión Melquíades Álvarez, integrante del equipo olímpico español desde 2007 a 2014 y con tres récords de Europa. Sus jóvenes pupilos se levantan antes de las 6:00 porque a esa hora ya están nadando en las piscinas de Inacua. Allí están hasta las 8:00, vuelven a clase y entrenan nuevamente por la tarde hasta las 20:00. Así a diario.
"Solo descansan los domingos", dice Álvarez que se encarga "de la labor en residencia, les aporto la experiencia de mis años como deportista, los apoyo en momentos difíciles, intento calmar el estrés y evitar la rendición". Francisco Agüera y Alejandro Páez tienen 18 años y estudian segundo y primero de Bachillerato respectivamente. Acaban de llegar de un campeonato en Oviedo y traen la sonrisa en la cara después de haber quedado terceros con la selección andaluza. La Residencia Andalucía es centro de tecnificación deportiva de esta federación.
"El trimestre pasado suspendí una asignatura por primera vez, estoy en segundo y se nota el cambio, al día tenemos un par de horas para cenar, estudiar y hacer los trabajos de clase", relata Francisco Agüera. También tienen concentraciones que los alejan de las clases y aunque la federación les justifica las faltas, en ocasiones les cuesta seguir el ritmo. "Eso sí, cada año vamos consiguiendo más cosas, se van amoldando a nuestros horarios de entrenamiento".
Reyes Millán, Ana Perea y Andrea Blindu son tres nadadoras de entre 14 y 15 años que compiten en categoría infantil y junior y que se dejan la piel cada día en el agua para superar sus propias marcas. Ana empezó las clases de natación a los 10 años, el club de Coín se le fue quedando pequeño y decidió echar la beca en la residencia. Andrea relata que, paradójicamente, le daba miedo el agua y que "mi madre me apuntó para que me pudiese meter". La experiencia finalmente le gustó y comenzó su carrera deportiva. "La verdad es que el entrenamiento es un sacrificio, es duro al principio vivir lejos de la familia, pero esto nos gusta y está muy bien", comenta Reyes. "Esto te hace madurar antes", apunta esta alumna brillante que quiere estudiar neumología o medicina deportiva.
Juan de Dios López es director técnico de la Federación Andaluza de Triatlón y entrenador de los ocho alumnos internos que hay en la residencia, chicos de entre 14 y 17 años. "Entrenamos cuatro horas al día, a las 5: 45 toca el despertador y a las 6:30 ya estamos nadando en Carranque", explica. Éste es el primer año que funciona un centro de tecnificación deportiva de triatlón y no han encontrado un lugar más propicio que éste para llevarlo a cabo. Para ellos no suponen más que ventajas tener una residencia junto a un centro educativo, en un lugar con amplios espacios, de la que pueden salir y entrar directamente en bicicleta y cerca de tres kilómetros de playa en línea recta por la que correr. "Antes los chicos estaban dispersos", relata Juan de Dios López y afirma que ahora "tener a chavales que no disponían de los recursos necesarios para la práctica de la natación, la bicicleta y la carrera en concentración permanente hace que el nivel suba".
Recuerda el director técnico de la federación que fue el ex jugador del Unicaja Nacho Rodríguez el que "cuando fue director general de Deportes de la Junta el que apostó mucho por un centro como éste". Sus jóvenes deportistas son de Almería, Granada, Sevilla y de distintos puntos de la provincia de Málaga y los fines de semana suelen competir con sus propios clubes. Juan de Dios López es el encargado de llevarlos a los campeonatos de España. "De los ocho, cuatro ya eran campeones de España y este año han mejorado sus tiempos y resultados", dice orgulloso este hombre que, además de residir con ellos, diseña su plan de entrenamiento, "como con ellos, salgo y me encargo de que estudien". Aunque no necesita estar demasiado pendiente porque, asegura, "son muy responsables".
Para las ocho plazas becadas en triatlón se recibieron 50 solicitudes y para hacer la selección no sólo se tuvo en cuenta el resultado deportivo, sino también el rendimiento académico. "La beca se le acaba cuando en un trimestre suspenden tres o más asignaturas", informa Juan de Dios López. Por eso, "estoy en contacto directo con sus tutores para ver cómo van". Triatletas, nadadores, futbolistas, acróbatas, bailarinas, jugadores de kayak polo, practiquen el deporte que practiquen, la vida de estos chicos no es la misma que llevan otros estudiantes de su edad. Su presente está lleno de retos que superar en todas sus facetas. Aprobar exámenes cuando se entrenan hasta seis horas diarias, asistir a clase después de haberse levantado antes de las seis de la mañana, disfrutar de la adolescencia y la juventud en el poco tiempo libre que queda y dar lo mejor de sí mismo en la pista, en el campo de juego o la piscina. No es fácil el cometido pero ellos demuestran que la capacidad humana, bien dirigida, no entiende de límites.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por SO/Sotogrande Spa & Golf Resort
Contenido Patrocinado