Antoñín Cortés fue uno de los broches del mercado la pasada temporada del Málaga CF. Con su fichaje se pretendía dar un pasito más adelante para poder luchar por el objetivo de ascenso. Pero al malagueño le costó sacar su mejor versión durante su vuelta a casa y acabó protagonizando algún episodio que afeó su campaña en La Rosaleda. El atacante vuelve a salir este verano a préstamo con destino a Portugal, al Vitória de Guimarães, donde será rival esta temporada de su ex compañero y amigo Kevin. El club luso se guarda una opción de compra.

"Muchas ganas e ilusión de empezar con este gran club. Vitoria gracias por la confianza ahora me toca a mí devolverla en el campo. ¡Nos vemos pronto conquistadores!", escribía Antoñín en sus redes, ya presentado con los colores de su nuevo club. El cuadro luso fue esta pasada temporada séptimo en la primera división portuguesa, clasificado para las eliminatorias de la Conference League –ganaron 3-0 al Puskas en casa y juegan la idea el jueves en Hungría–. De pasar de ronda se medirían al Hajduk Split croata.

Antoñín compartirá banquillo con un ex malaguista como Mikel Villanueva y con otro que casi lo fue por el verano de 2015, André André. Es la primera aventura en el extranjero del malagueño, su cuarto equipo tras Málaga, Granada y Rayo Vallecano.

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