El Betis hace cuentas para el fichaje de Sandro

Málaga/Tampoco terminan de favorecer los movimientos del mercado al Málaga. La dirección deportiva blanquiazul sigue al tanto de la situación de Sandro Ramírez en el Everton y apura sus opciones para intentar convencer al Everton para que el canario recale en Málaga y no en otra ubicación. A favor de los blanquiazules está el tiempo. A medida que pasan los días, Sandro sigue en Liverpool a la espera de que su futuro se aclare mientras que su entrenador, Sam Allardyce le vuelve la cara.

Mientras que el Málaga está en compás de espera para que la balanza económica le beneficie, otros actores entran en acción y acechan al delantero canario. El Betis ha dado un paso adelante y está seriamente interesado en contar con las virtudes del exblanquiazul en lo que resta de temporada. Tal y como desvela en su edición de ayer Diario de Sevilla, el vicepresidente deportivo verdiblanco, Lorenzo Serra Ferrer, tiene subrayado en su agenda el nombre de Sandro Ramírez.

En Heliópolis son conocedores de que la operación es compleja. Hay una larga lista de equipos que están interesados en los servicios del jugador, no solo en España, sino también en Italia e Inglaterra. El Everton ha tasado al jugador en unos diez millones de euros, cuatro millones más de lo que le costó al conjunto toffee romper el contrato del canario con el Málaga -seis millones-. El Betis parece dispuesto a encontrar fórmulas que satisfagan tanto al propio club sevillano como a los ingleses.

La cifra es disparatada para la situación invernal de los béticos pero abren una vía que sí haría factible el fichaje de Sandro. Serra Ferrer quiere plantear un préstamo hasta final de temporada y una opción de compra obligatoria tras la finalización del contrato para que la partida económica repercuta al presupuesto de la próxima temporada.

Esta posibilidad dejaría sin opciones ni poder de maniobra al Málaga por los servicios de Sandro que, pese a que no ve con malos ojos volver, no desestima recalar en el Villamarín. Además, la destitución de Míchel, con el que el canario tenía gran sintonía, reduce aún más el porcentaje de éxito de esta operación.