El Malagueño vio como se le escapaban sobre la bocina dos puntos que pudieron ser suyos en la Ciudad Deportiva del Granada. No lo puso sencillo el filial nazarí, pero el encuentro le dio la oportunidad de girar la balanza hacia su lado en varias ocasiones al blanquiazul. No aprovechó ninguna.

Un mano a mano de Rubén con el silbato en la boca del árbitro, un penalti a favor que Chica estrelló en el larguero y dominio del esférico que no acabó transformándose en lo más caro del fútbol: el gol. El Malagueño fue mejor que el Recreativo Granada en su feudo, tuvo ocasiones suficientes para llevarse los tres puntos –aunque los nazarís dieron algún susto–, pero no cambió nada.

El equipo parece haber ganado algo de presencia en el centro del campo con la llegada de Lolo y también ha sumado mordiente ofensiva con David Grande en la punta. Además, el otro fichaje, Xiscu, saltó de inicio –provocado en parte por las ausencias de Deco y Grasa– y generó la primera situación de peligro blanquiazul.

El Malagueño suma un punto ante un rival directo por la salvación como es el filial nazarí, acorta un punto con la salvación pero es insuficiente. La necesidad de sumar de tres en tres aumenta cada fin de semana y solo quedan ya 14 jornadas por disputarse. La reacción debe ser contundente y no puede quedar en uys.