Este fin de semana se dio el debut de Samu Castillejo con el Valencia en partido oficial. El malagueño quedaba libre este verano del Milan, tras ganar el Scudetto, y firmaba por el cuadro che. El extremo fue titular en Mestalla en su estreno ante el Girona, en el que jugó 74 minutos y ayudó a su equipo en el triunfo por la mínima (1-0). Pero el estreno dulce sobre el césped se tornó amargo al llegar a casa.

Fueron buenos minutos del malagueño en su retorno a LaLiga tras varias temporadas, donde regresa a la Comunidad Valencia tras su paso anterior por el Villarreal, desde donde voló al Milan. "Victoria sufrida pero merecida. Gracias afición por el gran ambiente y el apoyo", escribía justo tras el partido, con los tres puntos en el bolsillo.

Pero al regresar a casa Castillejo se topó con una fea escena. El malagueño compartió en sus redes poco después que había sufrido un robo en su domicilio. "Gracias por llevaros cosas materiales, personales y sentimentales", escribía irónico el malagueño, que mostraba en un vídeo cómo habían dejado su domicilio valenciano, con ropa y enseres tirados por el suelo, todo revuelto y desvalijado.

Esta es una práctica habitual entre ladrones de este corte, que aprovechan que los futbolistas están en mitad de un partido para perpetrar el robo, conscientes de que el domicilio estará deshabitado durante varias horas y que el riesgo se reduce. Como el de Castillejo son muchos los casos de jugadores relevantes que sufren este tipo de robos, alguno incluso con familiares en el interior. Karim Benzema, Isco, Piqué, Garay, Kondogbia, Varane, Joaquín, Morata o Casemiro son algunos de los jugadores que han sufrido este tipo de situaciones en los últimos años.

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