El centro del campo del Málaga CF, un dolor de cabeza para Sergio Pellicer

El Málaga CF no está teniendo tiempo para superar una plaga de bajas cuando la siguiente ya está aquí. En esta ocasión, la línea más afectada es el centro del campo, que, por fortuna, es la que más arsenal tiene para poder subsanar las distintas lesiones con otros futbolistas de campo.

En este caso, Ramón y Luismi, que son bajas de larga duración, junto con Juanpe y Darko Brasanac, que cayeron lesionados en el derbi andaluz ante el Córdoba CF en la primera mitad, son los cuatro centrocampistas que no estarán disponibles para este fin de semana, mientras que trabajan en sus respectivos procesos de recuperación. Además, Aaron Ochoa tampoco lo estará, porque se encuentra en una concentración con la selección de Irlanda sub 19.

Como consecuencia, solamente quedan listos para esta contienda: Izan Merino, Dani Lorenzo, Carlos Dotor, y Rafa Rodríguez. Además de estos, parece que Sergio Pellicer contará con Arriaza, ya que lleva varias sesiones de entrenamiento con el primer equipo. De esta manera, el técnico de Nules tendrá que hacer encaje de bolillos para armar una medular lo más competente posible, casi sin opción de poder armar un plan B demasiado variado al inicial.

Los dos jugadores disponibles que más están contando en estas últimas jornadas para Sergio Pellicer son el marbellí y el ex del RC Celta de Vigo, que, de hecho, salieron de inicio en la anterior jornada, pero las opciones para acompañarlos ya dependen del plan de partido, puesto que Izan Merino pude hacerlo como un jugador de un corte más defensivo, mientras que Rafa Rodríguez lo puede hacer más en la faceta ofensiva. Esta segunda puede tener más posibilidades, ya que el jugador sevillano llega en un gran momento después de su doblete ante el club blanquiverde. Por otro lado, Arriaza es otra posibilidad, pero que parece que lo será más desde el banquillo, dado que sería su debut en LaLiga Hypermotion.

También se podrán hacer nuevas probaturas con futbolistas de un corte más ofensivo, como es el caso de Julen Lobete, que ya jugó el año pasado de mediapunta en varias ocasiones. Otra opción posible sería la de que Izan Merino combine sus funciones de central, cuando tenga la posesión la Cultural Leonesa, con las de centrocampista cuando el equipo esté en fase ofensiva. Sin embargo, eso haría que hubiese peligro en las pérdidas en campo propio, porque tendría que ocupar su posición rapidamente, algo muy peligroso que podría costar un gol en una jugada aislada.