El Málaga comparte enemigo común con el Rayo Majadahonda para el encuentro de este domingo (18:00). Se trata del césped del campo del Cerro del Espino, que pertenece al Atlético de Madrid y que no reúne las condiciones mínimas para un espectáculo profesional como un encuentro de LaLiga 1|2|3.

El club de Martiricos informa a través de su departamento de comunicación que ya han iniciado las quejas formales a los organismos competentes. Ya no es sólo una cuestión de estética, es que el césped del feudo madrileño se encuentra (como se puede ver en las imágenes que acompañan a esta noticia) en un estado que puede poner en riesgo la integridad de los futbolistas.

Además, se da la circunstancia, para más inri, de que ese mismo día habrá un partido de la Liga Iberdrola. El Atlético de Madrid femenino tendrá un encuentro en el mismo campo contra el Barcelona a las 11:00 horas (semifinal de la Copa de la Reina), dejando un margen ridículo para la recuperación del verde madrileño.

El Cerro del Espino pertenece al Atlético de Madrid, club con el que el Rayo Majadahonda tiene un convenio por el que le cede las instalaciones. Las mismas tuvieron que ser remodeladas para que se permitiese a los rayistas competir en ellas, de ahí que durante un tiempo estuviesen compitiendo en el Wanda Metropolitano.

En el Rayo también están francamente preocupados por cómo está el tapete porque sienten que es perjudicial para su manera de jugar más allá del evidente riesgo de lesión. Ir al Cerro del Espino es como atravesar un túnel del tiempo. Los colchoneros lo tienen como base para el día a día desde hace más de dos décadas gracias al que fuera presidente atlético Jesús Gil.

El Málaga llegó a jugar allí contra el Atlético Madrileño en la temporada 1998/99, en la que se consiguió el primer histórico ascenso como Málaga CF. El resultado fue 5-3.