Dani Sánchez, sinónimo de victoria en el Málaga CF
Ha estado en los cinco triunfos y se coronó ante el Eldense con cinco asistencias de gol
"A por los 30 puntos"

No le llamen Dani Sánchez porque es Míster Victoria. Su presencia en el once de Sergio Pellicer es sinónimo de victoria esta temporada. Ahí están los datos. Cinco triunfos cuenta el Málaga en 20 jornadas y él es un denominador común.
Además, solamente en el partido ante el Albacete, donde se logró el primer triunfo de la temporada, no fue el lateral izquierdo titular. Sánchez entró en aquella ocasión en el minuto 62 por Víctor García, con el partido empatado a uno. Y ya se sabe cómo acabó, con ese tanto de Cordero...
Luego le ha tocado ser titular por decisión de Sergio Pellicer en La Rosaleda contra el Huesca, el Eibar, el Cartagena y, en esta reciente ocasión, contra el Eldense. Completó estos cuatro partidos, que supusieron otros doce puntos para los malacitanos.
Físicamente fue una auténtica locura de actuación la de Dani Sánchez, que se pasó la cita completa recorriendo la banda y aún le quedó gasolina para intentar un disparo brutal que casi fue gol (minuto 83).
Encima repartió cinco asistencias. Las de los goles de Cordero y Nelson y las de los tres goles anulados por el VAR. En el 1-0 controló el magnífico balón de Manu Molina y luego se la cedió al jerezano en una posición estupenda. Puso un córner brillante a Einar Galilea, que no subió al marcador porque su rosca se fue un poco por fuera de la línea de fondo.
Pero como no le valía servir a un central, en una falta lateral por su costado natural le regaló el tanto al portugués. Dijo el defensa que el mérito es de Manolo Sánchez por su estrategia. Seguro, pero tenía que haber un ejecutante preciso y fue el malagueño.
En el 58', esta vez desde la banda derecha, puso a Lobete un balón perfecto para el 3-0, pero otra vez intervino el VAR y el colegiado lo tuvo que anular por la intervención de Galilea desde fuera de juego. Y hubo una más, esta vez en juego y que acabó con tanto de Larrubia. Dioni andaba un pelín adelantado y el VAR metió otro bocado a la goleada. Y casi culmina con un golazo su noche de ensueño.
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