Una evolución insuficiente
Solo dos de los integrantes del once inicial ante el Burgos fueron fichajes posteriores al ascenso a Segunda División
Más cerca del descenso que del play off
El Málaga CF lleva ya tres derrotas consecutivas después de un buen arranque liguero en una temporada que parecía que iba a ser un punto de inflexión en el camino de vuelta a Primera División, que lleva mucho tiempo sin estra cerca de llegar a buen puerto. Las lesiones son lo más evidente en el análisis del por qué está cambiando el ritmo desde el quinto duelo de la campaña 2025/26.
Sin embargo, no es lo único en lo que excusarse, puesto que no hay más que ver el once inicial para darse cuenta de que solo había dos fichajes que no estaban durante la temporada de los blanquiazules en Primera Federación. Se trata de Julen Lobete, que llegó el pasado curso y todavía tiene dificultades para poder convertir su juego en estadísticas individuales, y Javi Montero, que llegó como respuesta a la marcha inesperada de Nelson Monte el pasado mercado estival de traspasos.
A estos dos nombres, hay que sumar los de Rafa Rodríguez, que debutó antes del descenso, pero sin ciontinuidad hasta el pasado curso, y Chupete, que experimentó una subida de nivel exponencial la psada temporada como líder del Atlético Malagueño en el descenso a Segunda Federación y revelación para el primer equipo.
El resto del once inicial del Málaga CF se podía ver en un partido cualquiera en la categoría de bronce en la 2023/24, mientras que, en el banquillo, se podía ver una gran cantidad de caras nuevas, que deberían de marcar la diferencia y significar una evolución del equipo hacia un aspirante al ascenso, pero parece que los cambios en la plantilla no terminan de ayudar a este salto tan esperado por la afición de Martiricos.
Lo que sí es cierto que, en la enfermería de La Rosaleda, se encuentran varios de los fichajes más influyentes desde que se consumó el ascenso a la categoría de plata del balompié nacional, como es el caso de Adrián Niño, Joaquín Muñoz y las bajas de larga duración de Álex Pastor y Luismi Sánchez. Jugadores que han tenido impacto desde su desembarco en la Costa del Sol, pero que, dependiendo del tiempo de recuperación de las dolencias físicas de cada uno, van a tener que estar alejados de los terrenos de juego un tiempo.
De esta manera, la dirección deportiva del Málaga CF tendrá que ponerse manos a la obra en el mercado invernal para terminar de llevar a cabo los cambios en la plantilla que quedaron pendientes este verano y buscar esa subida de nivel también en algunas posiciones, si es cierto que la intención de que este curso sea el del cambio para empezar a ser contendientes por el ascenso a la élite del fútbol español. Algo que no pasaba desde el primer año en Segunda División con Muñíz y Sánchez del Amo en el banquillo y Caminero en la dirección deportiva.
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