El Málaga ganó al Tenerife en un partido muy serio y en el que apenas nadie desentonó en lo individual. Antoñín tuvo acciones brillantes y aumenta su rango en el campo, aunque fue Sadiku el más decisivo. Bien los defensas en líneas generales.

Munir (*)

Dominó los cielos en su área y estuvo muy concentrado. A pesar de todo, el Tenerife no le probó apenas.

Cifu (*)

Mucho más enérgico que en otros partidos y más activo en ataque desde el inicio.

Luis Hernández (**)

En su sitio y firme, transmitió seguridad y apagó algún amago de posible fuego.

Diego González (**)

Concentrado y expeditivo, hacía tiempo que no cuajaba una actuación tan firme como central.

Mikel Villanueva (*)

Los rivales le buscan, pero mantuvo el tipo. A veces echa en falta alguna ayuda.

Keidi Bare (**)

Es el latido del Málaga. Muy activo aunque a veces un pelín precipitado. Sostiene al equipo y achica aguas como nadie.

Adrián (*)

Le faltaba algo de ritmo, aunque se desfondó. A veces hace algo más lenta la circulación. Sustituido

Antoñín (**)

No dejó de intentarlo cada vez que cogió el balón. Casi siempre que retó a su par salió airoso. Condicionó al rival.

Pacheco (*)

Algo intermitente, necesita más balón para lucir. Anduvo cerca del gol con un disparo de fuera del área.

Juankar (*)

En la primera mitad no se le vio como en los dos partidos anteriores. En la segunda empezó a desmontar al Tenerife por su ala.

Sadiku (***)

Gol de cazador. Pudo hacer alguno más. A veces no necesita a nadie para generar peligro y además contribuye de manera inteligente al juego del equipo. Se fue ovacionado.

Renato Santos (*)

Entró por Pacheco en un cambio de refresco. Activo y dinámico aunque sin una gran trascendencia.

Benkhemassa (*)

Como Renato, entró para ayudar a mantener el ritmo y el resultado. Ganas de agradar nunca le faltan.

Lorenzo (s.c.)

Entró por Sadiku y apenas tuvo tres minutos y el añadido. No le dio tiempo a mostrarse.