Loren Juarros y los capitanes del Málaga CF se reúnen: Todos a una

El director deportivo transmitió confianza y tranquilidad a Ramón, Alfonso Herrero, Galilea y Luismi

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Loren, Ramón y Herrero
Loren, Ramón y Herrero / M. G.

El Málaga intenta aislarse todo lo posible y que el ruido externo no afecte en la medida de lo posible dentro, especialmente en el verde. Después de semanas de cierta tensión por culpa de las derrotas, cada movimiento que se da se orienta en este sentido. El director deportivo, Loren Juarros, estimó oportuno reunirse con los capitanes del primer equipo antes de la cita contra el Andorra.

El ejecutivo blanquiazul se vio en el estadio al mediodía de ayer, una vez terminado el entrenamiento, con Ramón Enríquez, Alfonso Herrero, Einar Galilea y Luismi Sánchez, capitanes y portavoces del vestuario malacitano.

Juarros les transmitió calma. El director deportivo les hizo saber que hay confianza en ellos y en el entrenador, que entiende que esta racha es algo que entra dentro de lo posible en el mundo del fútbol y que deben quedarse con lo positivo. El burgalés es optimista pese a que todo se ve un tanto oscuro en la actualidad porque el Málaga, que aspiraba a algo más que a una permanencia tranquila, no termina de arrancar.

Fue algo recíproco. Los capitanes también expresaron cómo ven la situación y agradecieron la confianza, recalcando que el equipo está cohesionado y no hay fisuras dentro del vestuario.

Loren ya había hecho lo propio con el entrenador, Sergio Pellicer. A pesar de alguna salida de tono en sus ruedas de prensa, el director deportivo sigue confiando en el técnico de Nules, que ya la semana pasada pidió disculpas por sus palabras posteriores al encuentro contra el Deportivo.

Esta semana no hubo cónclave con los dirigentes porque no se entendió necesario, bastó con las conversaciones clásicas cuando se cruzan por el estadio.

Los jugadores asumen su cuota de responsabilidad y esperan lograr la regularidad que les está faltando en este principio de temporada, marcada también por los múltiples problemas físicos y ausencias de piezas elementales.

En el cuerpo técnico hay una gran satisfacción por cómo fue el entrenamiento de ayer, ya orientado al partido contra el Andorra del domingo. Intensidad y concentración. Los jugadores han activado el modo partido desde mitad de semana. Saben lo que hay en juego y el hartazgo que existe en la afición.

Ahora sólo falta que lleguen los resultados, si bien conviene recordar que de vencer el conjunto andorrano, igualarían los 14 puntos que sumó la temporada anterior tras las primeras once jornadas. La diferencia principal es que el curso pasado lo hizo con dos victorias, ocho empates y una sola derrota.

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