Hay aún un pequeño rayo de esperanza para el malaguismo con la permanencia pese a que lo que se ve en el campo apunta directamente al hoyo, al descenso a Primera RFEF. Pero mientras hay vida se puede pelear. Es por ello que el equipo no estará solo en el Carlos Belmonte este domingo. Informaba el club que se habían comprado 338 entradas desde la entidad para desplazarse a ver el partido en tierras manchegas. A través de diferentes peñas se ha organizado viajes en autobús para acudir a la ciudad más poblada de la región. Allí habrá un buen ambiente porque el equipo albaceteño está arriba en la tabla y con opciones de jugar la fase de ascenso a Primera después de venir de un descenso.

El malaguismo, por su parte, mostró su indignación en el partido ante el Real Oviedo pero una representación significativa aprovechará el buen horario del partido para desplazarse (14:00 horas de un domingo) hasta Albacete y disfrutar de un día completo animando al equipo. Tras muchos sinsabores toca una alegría, es la esperanza de los aficionados que se metarán 10 horas de autobús entre ida y vuelta para ver el partido.