El Málaga CF hizo el trabajo que tenía fijado para este mes de julio, lo hizo con rapidez, cumplida la primera quincena, ya había efectuado 10 fichajes y había subsanado el gran número de bajas que se había producido, sentando las bases de la temporada que viene y con nombres ciertamente ilusionante como el de Rubén Castro, Aleix Febas o Gallar. Ese primera fase se había completado con éxito, previa al stage de pretemporada, cuna de construcción del equipo de Pablo Guede.

Manolo Gaspar y su equipo tienen ahora por delante semanas más relajadas pero de mismo trabajo. Quedan las guindas, los jugadores que tienen que terminar de perfilar el equipo para cerrar una plantilla que compita por todo, por el ascenso a Primera División, mensaje que comienza a brotar pese a que se intenta ser moderados tras el fiasco del pasado curso. 

En el horizonte hay dos objetivos claros por el momento. Ya reconoció el propio Guede que el club trabaja en un sustituto de Kevin Medina, con el que se contaba para el extremo pero que decidió afectar la oferta del Gil Vicente para emprender una aventura en el extranjero, en la Primera de Portugal. Sin él, el argentino quiere un futbolista de similares características, un extremo al uso que pueda cambiar partidos partiendo desde el costado. La polivalencia, jugar en los costados o incluso que cuenta con experiencia como carrilero, es un plus a valorar.

El otro perfil que se persigue, bajo deseo y anhelo de Guede, es el del 10. El dorsal ya lo posee esta temporada Febas pero el argentino quiere un mediapunta al uso, de los de antes, un jugador que juegue entre líneas y que está capacitado para decidir desde esa posición, un futbolista con varita mágica. Gaspar reconocía que es una posición compleja, un perfil de los que quedan pocos y que no es barato.

A la entidad le queda alrededor de 400.000 euros entre lo que tiene consumido de Salario Liga y su límite salarial. Debe trabajar en ese margen a la espera de que lleguen nuevos ingresos. Se trabaja en convencer a empresas privadas y alguna que otra institución pública para que sigan apoyando al club con patrocinios que permitan afrontar la temporada con un salto cualitativo en el mercado. También está en el horizonte el caso Horta, aunque se trabaja en la entidad sin tener en cuenta esto.

El tramo final del mercado siempre suele ofrecer opciones interesantes, especialmente de jugadores que se quedan sin sitio en Primera y optan por Segunda, apareciendo posibilidades que antes eran imposible y pasan a ser factibles. También se debe contar con la posibilidad de firmar a un delantero más, a la expectativa de qué suceda con Chavarría (lesionado) y Adrián (sin ficha), así como algún perfil que, tras la pretemporada, Guede considere necesario reforzar.