málaga cf| valencia

Casi todo los músicos vuelven a afinarse

  • Sandro puso el hambre, Fornals el timón y Recio abrió la lata

  • Ontiveros regresó al once con protagonismo

Casi todo los músicos  vuelven a afinarse

Casi todo los músicos vuelven a afinarse

Si cada músico interpreta bien su partitura, el resultado debe ser una buena melodía. Y como nadie estuvo de capa caída ayer, el Málaga ofreció una buena mañana de sábado. Con algunos líderes, por supuesto, porque hubo méritos corales. Sandro, una vez más, fue de el más llamativo. Por su posición, su liderazgo, su aportación, su hambre. Tiene a La Rosaleda en sus manos y él sabe transformar esa devoción en rendimiento.

El ex del Barcelona hizo uno de los goles, pero fue Recio quien abrió la lata. Se le va a quedar corto el tramo final. Se ha perdido mucho tiempo de competición por las lesiones y ahora quiere exprimir al máximo lo que le queda por jugar. El malagueño anotó de cabeza a pase de otro canterano, Ontiveros, a quien Míchel está reenganchando. Alternó osadía y algún despiste y se marchó sin gasolina al banquillo, pero volvió a mostrar el camino a la continuidad.

Quien se llevó su primera ovación de la temporada fue Diego Llorente. El madrileño se vino arriba en una subida extemporánea que culminó con remate fuera. Tras todo el año recibiendo críticas, juega de nuevo con fe. A quien le sobra fe, físico y todo lo que se proponga es Fornals, quien ante los ojos del club que se está pensando pagar su cláusula mostró el mejor catálogo de virtudes. Fue, una vez más, el líder de la medular blanquiazul.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios