Pellicer: De su situación, leña a los árbitros y el estado de los jugadores del Málaga CF
Pidió al colectivo arbitral "humildad y empatía" y quitó hierro a otros asuntos
Una crisis y pocas opciones de revolucionar el once
Sergio Pellicer compareció ante los medios en la previa del partido que el Málaga CF juega este fin de semana en el campo del Racing de Santander. Capeó la crisis de juego y resultados como es habitual, pero dejó mensajes para unos y otros. Para sus futbolistas, para el árbitro de Burgos en particular y para todos en general. Y asumió la realidad del fútbol cuando no hay resultados con naturalidad, tratando de restarle importancia y recordando que no es la primera vez que se ve en una tesitura semejante, aunque matizó que alguna vez será la última. Dejó algún destello de su cosecha en forma de prosa poética, fiel a sí mismo.
“Esto es resultados. No son tres partidos brillantes pero no para estar con cero puntos. Si ves que el rival es muy superior… pero no ha sido así. Han sido momentos, minipartidos. Hemos estado más cerca de lo que queríamos que peor. Los detalles y errores nos han penalizado, pero no podemos quedarnos en eso, tenemos que hacer más. El Burgos es un ejemplo muy claro de equipo que compite sin ser brillante y sacar resultados. Estamos pagando un peaje y la mayor culpa es del entrenador. Ha sido una semana dura porque es la brisa del huracán y la brisa del huracán sólo se apaga ganando y sumando. Ya las he vivido muchas veces en este club y lo que hay que hacer es transmitir calma. Y lo de la expulsión no eran nervios, fue decirle lo que en realidad era desde el máximo respeto. Antes de perder a otro jugador por ir a protestar, prefiero que sea el entrenador, que no juega. Lo de Einar es una situación que hay que estudiarla, porque nos dicen que hay que tener empatía y en todos gremios hay de todo, pero veo que esta gente joven que está viniendo, en todos los puestos de trabajo, ha perdido la humildad. Se necesitan árbitros de la vieja usanza y gente que enseñe ese respeto y lo que es el fútbol y lo que es la vida”, se extendió el técnico de Nules.
“Voy a hacer 179 o 180 partidos… ¿Cuántas he vivido de estas? ¿Cuántas? En alguna… Son resultados. En otras ocasiones lo he visto mucho peor y sacando resultados. No es el Málaga de Pellicer, es el Málaga de todos. Los entrenadores estamos expuestos y hay que entenderlo. Son los pequeños detalles los que nos hacen mirar a un lado o al otro. Lo dije el año pasado. Esperamos poder darle las soluciones a lo que está ocurriendo ahora. No hay que buscar excusas, porque el que se excusa, se acusa. Eso va para todos. Esto es máximo nivel y hay que sacar rendimiento. Yo vengo muy calmado y lo de la expulsión se lo dije muy calmado. Viendo el partido, faltitas, lo de Einar… Yo ya cuando se terminó pensaba en el siguiente partido. Los entrenadores tenemos que gestionar rápidamente lo que va a venir, el partido siguiente. Pero sé cómo es el fútbol y aquí se demandan resultados y dar ese pasito más desde la humildad y el respeto. La gente quiere ver ganar a su equipo, pero pedimos también un poco de empatía por lo que está viviendo el equipo, pero no tiene que ser un lamento ninguno ni excusa”, continuó argumentando el entrenador blanquiazul.
El tema mental es una alusión clásica cuando se pierde tan seguido: "Volvimos en autobús, valorar también las cosas que son así. La primera charla es eso, que tengan más unidad que nunca. Hay jugadores que llevan tres años conmigo y los canteranos que han subido que tienen que entender que esto no es jugar en el juvenil o el filial, que aquí hay muchísima más responsabilidad. He sido entrenador en categorías inferiores y sé la importancia y la responsabilidad, que no tiene que ver. Todo lo que hagas aquí, a primer nivel, tiene una repercusión. Y a la gente nueva, que se asienten lo más rápido y entiendan lo que es Málaga. A algunos les cuesta entender. Tienen que tener su proceso. En esa coctelera de todos los jugadores, tienen que volver a pensar todos lo mismo. Son un grupo humano espectacular. También sufren, pero tienen que saber en lo que nos estamos equivocando y que debemos dar un paso hacia delante”.
Uno de los puntos del día fue cómo atizó al colectivo arbitral: "El otro partido que me cae es porque el vestuario de ellos estaba al lado del nuestro… Le dije que tuviera empatía. No te puedes dirigir… También tenemos que ser imagen porque hay mucha gente detrás. No hubo falta de respeto, sólo fue una apreciación. Hay entrenadores en Primera que dicen lo que dicen y no les pasa nada. Cuando hubo la reunión de entrenadores nos dijeron que iba a haber más empatía. Un poco de respeto y humildad, como nos enseñaron nuestros padres y abuelos”.
Añadió acerca de la roja a Einar Galilea: "El capitán del campo es Einar y yo estuve delante. Le dice: ‘Ha tocado el balón’. Si dices eso y ves amarilla y pierdes a un jugador… Nos estamos jugando mucho. Todos nos equivocamos, los que más los entrenadores y después son los árbitros. Hay gente más preparada que otra, con más empatía que otra”.
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