La polémica del Nàstic-Málaga vuelve: Querella al árbitro y detectives privados

El Nàstic de Tarragona sigue con su particular cruzada desde la eliminación a manos del Málaga CF en el pasado play off de ascenso a Segunda División, que acabó con ese gol de Antoñito Cordero en el minuto 122. Nunca aceptó el desenlace de la eliminatoria el club catalán, que señaló al colegiado Eder Mallo (que terminó subiendo también de categoría, conviene recordar) como el gran culpable. Ahora presenta una querella contra el vasco, según adelantó El Mundo, en la que se apunta que falseó el acta del encuentro y además presentando un informe de unos detectives privados.

El partido de vuelta de la segunda ronda del play off de ascenso, que se disputó en Tarragona el pasado 22 de junio, acabó salpicado de polémica y el Nàstic asegura que Eder Mallo cometió "falsedad en el acta arbitral". El vasco apuntó que temió por su "integridad física", pero un informe de los Mossos d'Esquadra concluía que "en ningún momento se vio comprometida la integridad física de los árbitros ya que su vestuario se encuentra en un pasillo de acceso restringido con vigilantes de seguridad". El club catalán ha presentado, como si de una película se tratase, un informe elaborado por la agencia de detectives Francisco Marco & Co, que aseguran que en una conversación con los mismos, el árbitro desmintió su propia acta.

Conversación en una cena privada

"En una cena previa a la celebración del partido, determinadas autoridades de Andalucía y de la ciudad de Málaga que se habían trasladado a Tarragona manifestaron que tenían el partido controlado y que lo único que les preocupaba era la reacción del público", recoge el informe de los detectives haciendo alusión al testimonio de la dueña del restaurante al que supuestamente habían acudido.

La hostelería sigue jugando un papel fundamental en este asunto. Los detectives añaden también que el propio árbitro estuvo la noche anterior al partido en el Sports Legends Tavern de Salou y uno de sus empleados dijo literamente que tenía "la matrícula tomada" al número 3 del Nàstic, que fue expulsado en dicho encuentro, y que hubo palabras despectivas hacia la ciudad de Tarragona.

Para seguir con el guion, propio de la película de mediodía en cualquier canal random de TDT, el Nàstic aporta un informe del exárbitro Estrada Fernández en el que asegura que cometió errores Eder Mallo ("Más de 13 flagrantes"): "un patrón de favoritismo que se va acrecentando a medida que el resultado del partido es desfavorable al ascenso del Málaga".

Cierra El Mundo apuntando que la entidad tarraconense cifra el perjuicio en 47.964 euros y reclama 5,4 millones en concepto de lucro cesante al tiempo que atribuye al colegiado un delito de corrupción deportiva.